Dos tragedias sobrecogieron ayer la isla de Tenerife en un miércoles negro. A primera hora de la mañana, un helicóptero de la Guardia Civil localizaba en la zona de Barranco Hondo los cuerpos sin vida de Elio H.G., de 83 años, y de su hija María de los Ángeles H.B., de 59, a los que se buscaba desde el pasado fin de semana tras denunciar la familia su desaparición el viernes. La asociación SOS Desaparecidos también emitió una alerta para su búsqueda.
Así lo confirmaron fuentes de la Guardia Civil, que precisaron que los cuerpos fueron encontrados en el mar, concretamente, en la zona de Varadero, cerca del coche, marca Toyota de color vino, en el que fueron vistos por última vez cuando trataban de acudir a un centro de salud al que nunca llegaron.
Las primeras hipótesis de los agentes del Instituto Armado apuntaban ayer a que los cuerpos fueron expulsados durante los vuelcos que dio el vehículo tras precipitarse por un barranco y caer a la costa. El suicidio cobra fuerza entre los investigadores como posible causa del siniestro. En el dispositivo de rescate intervinieron efectivos del grupo de montaña de la Guardia Civil dada la complicada orografía para el rescate.
Por la tarde, otro suceso sobresaltaba al núcleo de Los Cristianos, en el municipio de Arona, en la avenida Los Playeros. Una mujer de 82 años, de nacionalidad española, aparecía muerta en su domicilio con signos de violencia. Al llegar a la vivienda, los servicios sanitarios nada pudieron hacer por salvar su vida.
La colaboración ciudadana, con varias llamadas al 1-1-2, permitió una rápida intervención de la Policía Nacional en el lugar de los hechos, donde hallaron el cadáver de la octogenaria y junto a él su pareja, un varón de 83 años, también de nacionalidad española, que presentaba lesiones y que fue evacuado a un centro hospitalario, donde ingresó bajo custodia policial.
Las primeras indagaciones se decantaban anoche por un presunto asesinato machista supuestamente cometido por su pareja, pero tampoco se cerraban otras líneas de investigación.
Fuentes de la Delegación del Gobierno apuntaron que los agentes de la Policía Nacional se encontraban recabando todos los datos posibles en el lugar de los hechos y confirmaron que no constan antecedentes de denuncias por violencia de género entre la pareja.
Los dos sucesos se produjeron horas después de otro siniestro que acabó con la vida de un hombre, ahogado en la costa de Arico. Los servicios médicos desplazados al lugar le practicaron, el martes por la tarde, a la víctima maniobras de reanimación, pero no pudieron recuperarla de la parada cardiorrespiratoria.
