El buen tiempo acompañó a las ganas de fiesta que la ciudadanía satisface con cuanta celebración se ponga a tiro después de La Gomera. Ayer fue el turno para la Romería de Valle de Guerra, que celebró su LXXIII edición en honor de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza. Cientos de personas se dieron cita en el entorno de la iglesia para iniciar el recorrido en el que participó más de una veintena de carretas, camino que estuvo amenizado por varios grupos folclóricos.
La jornada finalizó con una verbena en la plaza de la iglesia que estuvo amenizada por la orquesta GeneraSión y el grupo Nueva Línea.
El alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, y el concejal de Fiestas, Badel Albelo, agradecían a la Comisión de Fiestas de San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, así como a todas las personas que han colaborado en la programación, “el esfuerzo y el cariño puestos para mantener viva esta tradición a pesar de las dificultades, especialmente durante la crisis sanitaria”.
Valle de Guerra regresa con sus tradiciones
Después de las limitaciones provocadas por la pandemia, el regidor local destacó que, “por fin, podemos recuperar esta festividad tan arraigada al pueblo lagunero con todo su esplendor, como ya pudimos comprobar el pasado fin de semana en el tradicional baile de magos. Esto, sin duda, no podría haber sido posible sin la entrega de las valleras y valleros, que generación tras generación han conservado y protegido esta celebración, con el mismo esmero y corazón, hasta llegar en este 2022 a su 73 aniversario”.
En la misma línea, Badel Albelo resaltó que la romería, “que ha logrado perdurar en el tiempo gracias a los vecinos y vecinas de Valle de Guerra, es uno de los festejos más arraigados y multitudinarios de La Laguna”. El edil agrega que desde el área “se viene apoyando más que nunca” a las comisiones de fiestas encargadas de los distintos actos populares y tradicionales del municipio “ante el trabajo y esfuerzo económico y personal que conllevan, sobre todo después de estos dos años de pandemia. Tenemos el deber de preservar y divulgar nuestra riqueza cultural y desde el Ayuntamiento continuaremos cumpliendo con nuestro compromiso”, subraya el concejal.
Aparte de Valle de Guerra, otros núcleos también celebraron sus fiestas este fin de semana. El Pico celebró el viernes la Noche Joven, y el sábado una recogida de alimentos y el baile de magos, cerrando su programa festivo ayer domingo con la función en la función en honor a San Isidro Labrador.