En Las Palmas de Gran Canaria, el caso de Graciela es doblemente ejemplar; por un lado tiene a sus 8 gatos en perfectas condiciones de salud y bienestar, y por el otro busca un alquiler donde le permitan tenerlos, ya que nunca los dejará atrás. Necesita una acogida temporal para ellos.
Alquilar hoy en día una vivienda se está convirtiendo en un asunto complicado, ya que al alza de los precios de casi todos los productos se le suman los elevados costes de los alquileres desde hace varios años atrás.
Por si fuera poco, como señala Leales.org, son muy pocos los dueños de los inmuebles que permiten animales, en los contratos tipo ya viene por definición la palabra prohibido mascotas, “metiendo en el saco a cualquier tipo de animal, aún teniendo buen comportamiento o careciendo la vivienda de muebles”.
Graciela no pierde su esperanza de encontrarle un hogar definitivo a sus 8 gatos, mientras tanto busca una acogida temporal hasta encontrar el alquiler de la vivienda que le permita tenerlos, para ello prefiere incluso que la vivienda esté sin amueblar.
“La mayoría de los caseros desconocen que hoy en día existen seguros de animales en viviendas de alquiler, además de la posibilidad de pactar una fianza adicional en caso de tener animales de familia”, aseguran desde la asociación, que se ofrece para mediar para encontrar un solución a la situación.
