La estampa de un plato con camarones pelados en Tenerife se viralizó hace apenas unas horas dada la perfección con la que un anónimo comensal peló este delicioso marisco. Tras la famosa historia popularizada en Twitter, está la historia personal, la que encarna una tinerfeña ‘con mucho arte’.
Y es que la cerveza con camarones es el ‘sota, caballo y rey’ de las Islas. Mientras en otros territorios esperan por la época estival, en Canarias se puede disfrutar de este manjar durante prácticamente todo el año.
Ejemplares grandes, pequeños, con huevas, sin ellas… Y como camarones, también hay peladores, ya que está el que los despedaza, el que aprovecha hasta las cabezas y, en el otro extremo, el que los disecciona.
“Ayer un cliente en el bar, después de pedir camarones y comérselos, devolvió el plato así”, compartió un hostelero este lunes en su cuenta de Twitter junto a una instantánea que refleja a la perfección cómo se debe dejar un plato de camarones pelados en Tenerife.
La imagen del restaurante, ubicado en el sur de Tenerife, concretamente en Las Galletas (Arona), cuenta ya con más de 136.000 me gusta y numerosos comentarios. Eso sí, lo que no sabían los curiosos atraídos por esta historia es que aparecería en escena la hija de la autora de la ‘obra de arte’.
Una tinerfeña, autora del plato perfecto de camarones pelados en Tenerife
Tras la publicación de la imagen, el hostelero dio algunas pistas sobre el autor o autora del plato perfecto de camarones pelados en Tenerife, planteando a quienes comentaban que “por qué pensáis que era un hombre”. Y, en efecto, la pista fue útil, ya que al poco tiempo apareció la hija de la autora del curioso plato.
“Hola, es mi madre. Tengo pruebas para demostrarlo, estoy flipando a dónde ha llegado esto JAJAJAAJAJ” comentaba en Twitter Lorena Hernández (@lorena_hdezz), desvelando que se trataba de su madre y adjuntando la conversación en la que su progenitora confesaba los hechos.
“Sí que fui yo, eso fue en el bar del muelle, allí en Las Galletas, donde vamos con papá que te tomas las cañitas. Allí lo hice, el plato es ese”, confirmó la protagonista de la historia.
No obstante, el misterio de por qué deja así el plato queda sin resolver, pero la historia ha servido como una fantástica publicidad para el bar en cuestión, cuyo propietario no ha tardado en informar de que el plato de camarones está a 7 euros. Y, a juzgar como dejan el plato perfecto de camarones pelados en Tenerife en su local, ¡deben estar de rechupete!
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