La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz, presidida por el alcalde, José Manuel Bermúdez, aprobó ayer la contratación para la redacción del proyecto, dirección de obra y coordinación de seguridad y salud de los trabajos de creación de una red de movilidad personal en el centro de Santa Cruz de Tenerife, con plazas de aparcamientos y puntos de recarga eléctrica para Vehículos de Movilidad Personal (VMP) y bicicletas, con un presupuesto base de licitación de 61.311 euros y un plazo de ejecución de tres meses.
Un proyecto que supondrá crear 250 aparcamientos de este tipo en el Intercambiador y el Parque Marítimo, y otras 120 plazas distribuidas por el centro de la capital, coincidiendo con la futura zona de bajas emisiones. A esto se sumarán 41 puntos de recarga.
Bermúdez afirma que “esta iniciativa se sostiene en el programa de ayudas a municipios para la implantación de zonas de bajas emisiones y la transformación digital y sostenible del transporte urbano”. Asimismo, añade que “esto está contemplado en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, insertado, además, como un importante capítulo dentro de la financiación europea de los fondos Next Generation”.
Asimismo, sostiene el alcalde, “el principal objetivo es el cambio modal del vehículo privado a VMP no contaminantes, por lo que esperamos que se derive una disminución importante de las emisiones de gases y ruidos, lo que mejorará la seguridad y el medioambiente urbano” y añade que “esta iniciativa se sostiene en el Pacto de las Alcaldías en materia de reducción de emisiones y se espera una reducción del tráfico en el centro del 5% anual”.
Por su parte, Carlos Tarife, concejal de Servicios Públicos, entiende que “el objetivo ha sido plantear una propuesta que conlleva el mínimo de obras civiles y la inclusión de 30 calles al menos donde convivan las distintas modalidades de transporte, todo con la intención de que genere un efecto de evaporación del tráfico en el interior de la urbe”.
Esta red aprovecha el carril bici de la costa, ya existente, interconectándolo con los principales nodos estratégicos mediante rutas ágiles, cómodas y seguras a través de vías adaptadas para los VMP de forma no segregada en aquellas calles que tengan un único carril por sentido para el tráfico rodado.
Para ello, se empleará señalización horizontal y vertical, semafórica, pavimentos diferenciados, además de un sistema de videovigilancia en puntos de interés. En algunos tramos y cruces se crearán carriles segregados de acuerdo con las recomendaciones para proyectos de infraestructura ciclista, de forma que se cumplen los requisitos mínimos de calidad.
En cuanto a infraestructuras, se crearán dos centros nodales de aparcamientos de bicicletas y vehículos de movilidad personal. Estos tendrán sistemas de videovigilancia y acceso de usuarios registrados para garantizar la seguridad. Uno se ubicará en el Intercambiador y el otro en el aparcamiento disuasorio del Parque Marítimo. Estos tendrán, de inicio y en suma, 250 aparcamientos y al menos 25 puntos de recarga eléctrica.
Complementariamente, a distancias de menos a 400 metros, se ubicarán a lo largo del carril bici existente cuatro minicentros de aparcamiento con 20 plazas de media cada uno. Estos se configurarán para lograr un acceso cómodo a la red ciclable que conectan los polos de atracción o nodos estratégicos. Y con el mismo patrón de distancia, se ubicarán otros cuatro minicentros de aparcamiento (10 plazas cada uno) en los nodos de la red ciclable.
Esto hará un total de 120 plazas más para facilitar el aparcamiento en el centro de la ciudad. De estas, se instalarán repartidamente 16 puntos de recarga conectados a la red de alumbrado.
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