Días después de que Ana María Aldón revelase en ‘Fiesta’ que José Ortega Cano y ella ya se han sentado para dar los primeros pasos de cara a formalizar su separación una vez han descubierto que su crisis no tiene ya solución posible, las informaciones sobre el divorcio de la pareja no dejan de sucederse.
Tal y como mantiene el periodista Antonio Rossi, el convenio ya está redactado y tan solo queda que el torero y la diseñadora lo firmen, y a pesar del hermetismo que rodea al proceso, todo apunta a que será un divorcio amistoso de mutuo acuerdo, en el que lo más importante es que el hijo que tienen en común – José María, de 9 años – sufra lo menos posible.
Se especula con que la custodia del pequeño será compartida, y de ahí que la casa que está buscando Ana María para iniciar una nueva vida lejos del torero, tiene que estar sí o sí cerca del domicilio familiar y del colegio del niño. Requisitos que podrían estar complicando la búsqueda y por los que la gaditana ha sido tachada de ‘exquisita’ por algunos y ‘cómoda’ por otros, ya que está a gusto conviviendo bajo el mismo techo que Ortega y de ahí que no tenga prisa por irse.
Informaciones que coinciden con la reunión que el diestro ha mantenido con los que se dicen que podrían ser sus abogados y sobre la que el viudo de Rocío Jurado prefiere no dar ningún detalle. Y es que, como confiesa más tranquilo que en los últimos días – en las que son sus primeras palabras sobre su divorcio de Ana María – se tratan de “cosas privadas y personales” que, asegura, no quiere que trasciendan públicamente.