La Policía Nacional ha desmantelado un punto de venta de droga en el barrio de Santa María del Mar en una operación que contó con la participación de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife y con el Área de Vigilancia Aduanera de la Dependencia Regional de Aduanas e Impuestos Especiales, dando como resultado la detención de seis personas implicadas. Fueron los vecinos los que denunciaron la existencia del narcopiso en Santa Cruz de Tenerife.
En el operativo se incautaron sustancias estupefacientes, dinero en efectivo y se inmovilizaron bienes por valor de 720.000 euros. La Policía Nacional tuvo conocimiento de los hechos gracias a la colaboración vecinal que indicó, a través del correo anónimo de participación antidroga@policia.es, que en un bloque de pisos del barrio se venía observando una afluencia de personas que adquirían sustancias estupefacientes a individuos que al parecer habían consolidado su actividad, invirtiendo los beneficios obtenidos en la adquisición de propiedades.
Así pues se inició la investigación que corroboró los hechos y permitió descubrir que quién estaba detrás de esta venta de droga era una familia cuyo líder vivía en Arafo, así como también pudieron localizarse las sustancias incautadas en uno de los pisos de la familia.
A raíz de la investigación y con las comprobaciones necesarias se desarrolló un dispositivo dirigido por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Santa Cruz de Tenerife, con el apoyo de la Unidad de Prevención y Reacción, así como unidades de guías caninos de la Policía Local, con el objetivo de realizar entradas y registros en domicilios de Santa Cruz y Arafo, autorizados por la autoridad judicial.
Como resultado pudo desmantelarse el punto de droga y desarticular el grupo criminal, procediendo a la detención de seis personas, tres hombres y tres mujeres, todos de nacionalidad española.
En los registros se incautaron 450 gramos y 35 dosis preparadas para la venta de cocaína, cuatro kilos de sustancias para su corte y elaboración, 13 kilos de hachís, 200 gramos de marihuana, varias dosis de MDMA, balanzas de precisión y 53.000 euros en efectivo, además de teléfonos móviles de alta gama, una pistola simulada, tres coches, una motocicleta y otros bienes susceptibles de haber sido adquiridos con los beneficios económicos del tráfico de drogas.
Por otra parte, la autoridad judicial competente, a instancias del Área de Vigilancia Aduanera, que colaboró en el dispositivo, decretó la inmovilización de patrimonio por valor de más de 720.000 euros y el ingreso en prisión de los tres varones detenidos.