El Museo Rodin Santa Cruz ha dejado de ser una posibilidad. Ayer, los rectores del museo francés anunciaron su renuncia a formar parte del mundo cultural de Santa Cruz, un sector en el que importantes firmas habían alzado su voz contra la inversión de 16 millones que el Ayuntamiento capitalino había comprometido con la institución francesa.
Y es que desde Rodin París las críticas recibidas, aseguran, atacan el prestigio del escultor y del propio museo. Así lo expresó su directora, Amélie Simier, en la carta remitida al alcalde, José Manuel Bermúdez, y que se hizo pública ayer. Una renuncia a un proyecto al que el arquitecto Fernando Menis ya había hecho hueco en su diseño para rehabilitar el Parque Cultural Viera y Clavijo, y que, aseguran desde el Ayuntamiento, no se va a ver afectado, puesto que el uso previsto sigue siendo el cultural.
En cualquier caso, la carta ha provocado que el alcalde ordene la paralización del expediente que se había iniciado a finales de diciembre para la compra de casi un centenar de piezas por esos 16 millones de euros.
Simier, que visitó el año pasado el Viera y Clavijo para conocer el lugar que albergaría la obra de Rodin, reconoce al alcalde en su misiva que “somos sensibles a los recientes acontecimientos en su ciudad y a las desafortunadas declaraciones de una parte del sector cultural, académico o político. Estas declaraciones mentirosas, o, como mínimo, mal informadas, atacan a nuestro museo, establecimiento público del Ministerio de Cultura francés, a la obra de Rodin y a su patrimonio, del que somos depositarios”.
Y es que el Museo Rodin defiende el legado del escultor, así como su vinculación con España, a través de distintas colaboraciones con instituciones del país a lo largo de los años.
“Debido a esta fuerte presencia en el conjunto del territorio español desde hace más de 20 años, lamentamos con mayor fuerza el actual cuestionamiento de Rodin como artista universal, el cuestionamiento de la originalidad de sus obras y el cuestionamiento de las motivaciones de una institución pública nacional como la nuestra”.
“En este contexto, señor alcalde, quería informarle que nos parece prudente no continuar con este proyecto. Sepa que esta es una decisión cuidadosamente considerada y tomada con pesar”, concluye.
Esta renuncia ha supuesto un jarro de agua fría para un equipo de Gobierno que ha venido defendiendo a capa y espada este proyecto para la ciudad, frente a la crítica de la oposición y de numerosas voces de la cultura, tanto local como nacional.
José Manuel Bermúdez
El alcalde, José Manuel Bermúdez, mostraba ayer su “decepción” por la pérdida de lo que define como una “gran oportunidad” para Santa Cruz. “Hace un año y medio esta capital tuvo la oportunidad de traer un museo de referencia internacional. Rodin era un buen proyecto para un museo en Santa Cruz, que, por desgracia, se ha encontrado con el rechazo de una parte de ciudadanos ligados al ámbito cultural y, sobre todo, de partidos políticos como PSOE y Podemos”.
El regidor confirma que, “ante el clima generado, los propios rectores del Museo Rodin París han decidido renunciar al proyecto, y, como consecuencia, he ordenado la paralización del expediente”.
También anunció que va a dialogar con las entidades culturales de la ciudad, con el objetivo de definir el contenido para el Viera y Clavijo.
“Para nosotros era un proyecto ilusionante que incorporaba un nuevo museo a la oferta cultural de la ciudad, y lo poníamos en valor con las Exposiciones Internacionales de Esculturas en la calle. Vamos a seguir trabajando en la línea de buscar buenos proyectos para Santa Cruz y abrimos desde ya el diálogo con instituciones como la Real Academia de Bellas Artes o el Círculo de Bellas Artes. Se cierra una puerta y se abrirán muchas otras”, concluyó el alcalde.
Oposición
Frente a la decepción de Bermúdez, la alegría de la oposición conformada por PSOE, UP y Cs, que entiende la renuncia del Museo Rodin como una “victoria de la cultura local”. Al menos así lo define la exalcaldesa socialista Patricia Hernández, quien ayer apuntó que “se trata de una magnífica forma de empezar 2023 y un bonito final para este esperpento”.
“Celebramos que el sector cultural haya podido parar este pufo y lo único que lamentamos es que este parón no haya sido fruto de una rectificación de Bermúdez, sino de la vergüenza generada al Museo Rodin en medios nacionales e internacionales por las abrumadoras y justificadas críticas que recibía el proyecto del sector cultural y de la ciudad de Santa Cruz”, explica Hernández.
La también diputada socialista advierte de que seguirá de cerca el acto administrativo que paraliza la adjudicación de los 16 millones. “De no recibirlo y de tratarse de un anuncio, seguiremos adelante con el plan de impugnar ante los tribunales el proyecto”.
Ramón Trujillo (UP) se expresó en términos similares. “Evidentemente es positivo que se pare algo que habíamos descrito como un despilfarro y algo inmotivado”, dijo.
Para el portavoz de UP, el desistimiento “quizá sea la forma en la que el equipo de Gobierno le haya pedido al Museo Rodin salir de este tema de manera honrosa” y añadió que “la clave está en que el tema ha salido en varios medios nacionales, en los que el equipo de Gobierno no tiene capacidad de limitar el impacto”.
Aún así, avanzó Trujillo, “hay que investigar lo que ha pasado, como que el contrato de impacto económico se ofertó a tres empresas que compartían directivos”.
Matilde Zambudio, portavoz de Cs, también lamentó que el proyecto no haya sido paralizado por el propio alcalde, definiendo el Museo Rodin Santa Cruz como “un intento de imposición” por parte de Bermúdez.
Zambudio, que califica de “disparate” el gasto que se pretendía hacer, pide que se dialogue con el sector cultural para darle un uso al Viera y Clavijo “priorizando nuestra cultura chicharrera, nuestros artistas, nuestro carnaval, que bien pueden generar economía y puestos de trabajo, con mucha menos inversión que en un museo de copias”.
La portavoz de Cs también carga contra el PP por su apoyo a este proyecto, acusándolo de ser “la eterna muletilla del PP”.
PP
Precisamente, el PP había pedido este mismo lunes diálogo con el sector cultural para que el expediente del Museo Rodin se desarrollara con la mayor claridad posible, señalando que “la figura de Rodin está fuera de toda duda, pero los grandes proyectos para la ciudad no pueden ser unipersonales: hay que hacer partícipe a la ciudad”, en clara referencia a su socio de Gobierno.
Ayer, tras conocerse la noticia del desistimiento, su portavoz Carlos Tarife tildaba de “fracaso absoluto” el abandono del proyecto. “Era una excelente idea que habría convertido a Santa Cruz en la cuarta ciudad en el mundo que contaría con esta institución, pero este expediente no empezó como debía”, apuntó el edil del PP.
Además, insistió en que “los proyectos grandes no pueden ser de un solo partido político, son para Santa Cruz, y lo que hay que hacer es involucrar a todas las partes”. Aún así, apuntó que “cualquier propuesta hubiera encontrado el no, porque tenemos la peor oposición, y lo personalizo en Patricia Hernández, que habría dicho no a Picasso, Rodin o a cualquier otro museo”.
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