gastronomía

La Guía Repsol reconoce con dos Soles a Nub, en Bahía del Duque

Los restaurantes de Tenerife El secreto de Chimiche (Granadilla), Kensei (Adeje) y Taste 1973 (Arona) se estrenan con un Sol; Bevir y Muxgo, en Las Palmas, debutan en la lista
Bahía del Duque

La gala de entrega de los Soles Guía Repsol, celebrada ayer tarde en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA) bajo el lema ‘La cocina nos llena’, ha traido buenas noticias para Canarias ya que con las nuevas incorporaciones esta comunidad suma ya un total de 34 restaurantes galardonados: 1 con tres soles, 5 con dos soles y 28 con un sol. En esta nueva edición se estrena con 2 Soles el restaurante Nub (Costa Adeje) y reciben 1 Sol Repsol Bevir y Muxgo (Las Palmas), El Secreto de Chimiche (Granadilla de Abona), Kensei (Adeje) y Taste 1973 (Arona).

En Nub, el cocinero italiano Andrea Bernardi y la chilena Fernanda Fuentes-Cárdenas, afincados desde años en Tenerife, han consolidado una propuesta gastronómica elegante y mestiza, una cocina de búsqueda y rescate de sus orígenes que tiende puentes entre América, Europa y Canarias. Este restaurante, ubicado en el hotel Bahía del Duque, presta atención a la despensa local y en sus platos afloran las raíces de sus responsables en la puesta al día de iconos como el ceviche, la ensalada caprese, el turrón de vino y la sopa minestrone.

La pequeña edificación que albergó en su día la empaquetadora de tomates de Chimiche (Granadilla), en plena carretera que atraviesa las medianías de Abona, es hoy el restaurante El Secreto de Chimiche, cuya calidad ha dejado de ser un secreto a voces. Roberto Castro, curtido en el M.B tinerfeño de Martín Berasategui, es su responsable de sala y sumiller. Mientras, la chef Diana Marcelino persigue la excelencia en la selección del producto, en buena parte chasnero, procedente de fincas cercanas, y en la ejecución con él de una cocina refinada pero directa y especializada en brasa, sobre la que posan cabra, cabrito, lubina, chipirón, cochino negro y cortes de ganado mayor.

Víctor Planas fue hombre de confianza de Ricardo Sanz y chef ejecutivo regional en el Grupo Kabuki original antes de decidir volar por libre y emprender en las instalaciones del hotel Bahía del Duque. Allí, con acceso directo desde el paseo marítimo, instaló Kensei, un restaurante centrado en cocina japonesa contemporánea que destila elegancia, refinamiento y conocimiento, y cuenta como complemento vistas a los jardines, a la Playa del Duque y al océano Atlántico. De dirigir la sala se encarga la italiana Stefania Giordano, también con sobrada experiencia como maître en Nerua y Eneko, ambos en Bizkaia.

Taste 1973, en el hotel Villa Cortés, es un ameno y sabroso escaparate de los hábitos alimentarios, las herramientas y las costumbres de los aborígenes canarios. La prehispanidad es inspiración y motor de la creatividad de Diego Schattenhofer, chef argentino pero desde muchos años afincado en Tenerife, inquieto, inconformista e innovador que se sirve de técnicas, ingredientes y réplicas de utensilios encontrados en yacimientos arqueológicos para rescatar su legado y dar mayor credibilidad a la experiencia. Villa Cortés presta sus instalaciones a esa experiencia gastronómica donde desfilan elaboraciones a base de gallina y cabra tinerfeñas, así como pescados madurados.

Gran Canaria

‘Bevir’ ha experimentado una notable transformación con los recientes cambios que afectan a su ubicación y a la dirección de sala y de cocina, confiada ahora a José Luis Espino. Con él al mando y ubicado en Triana, barrio destacado de la capital, el restaurante puede presumir de confortabilidad y de una propuesta gastronómica sobrada de armonía donde asoman la creatividad y capacidad técnica del chef. Éstas se plasman en menús de connotaciones novelescas (Fortunata y Jacinta son sus nombres) que conceden protagonismo a productos de proximidad como la remolacha, la ostra, el nabo, el chipirón, la coliflor y el limón.

Tras dejar atrás Texeda, Borja Marrero mantiene la sostenibilidad por bandera y su sempiterna pasión por la autoproducción en Muxgo, restaurante gastronómico ubicado en la azotea del hotel Catalina Plaza. El chef practica una cocina de territorio cada vez más sutil, merced a la inteligente conjugación de técnicas y hierbas silvestres y cultivadas, para obtener texturas y sabores atractivos.

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