Los portuenses están más que acostumbrados a observar la bravura del mar en una costa. Una suerte de evento natural que se repitió este martes ante la atenta mirada de numerosos transeúntes que miraban embelesados la fuerza de las olas.
Uno de ellos decidió coger su teléfono móvil y grabar el “espectáculo” mientras paseaba. Lo cierto es que el bufido de las olas al romper contra los riscos de la piscina natural de Laja de la Sal, en la costa de Martiánez, es impresionante.