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Zambudio: “Espero que los indecisos vean en mi paso al PSOE que Patricia Hernández es la única alternativa”

El 28 de mayo vuelve a haber elecciones, y Matilde Zambudio y Patricia Hernández han decidido que es la oportunidad para terminar el trabajo que ambas empezaron en 2019
Patricia Hernández
Foto: Sergio Méndez

La ola que impulsó a Ciudadanos en toda España también llegó a la capital, y con ella, Matilde Zambudio, alcanzó la primera tenencia de Alcaldía de un municipio que, por primera vez en los últimos 40 años, no iba a estar gobernado por Coalición Canaria.

La buena sintonía entre la alcaldesa socialista, Patricia Hernández, y la cabeza de lista de Ciudadanos, propició un pacto que, con el apoyo desde fuera de Unidas Podemos, impuso el cambio de gobierno en la capital. Una año y medio más tarde, una moción de censura desalojó a ambos partidos del equipo de gobierno, en parte por la descomposición de Ciudadanos, con un concejal a la fuga, Juan Ramón Lazcano, y una concejala, Evelyn Alonso, que hizo oídos sordos a su partido y apoyó a CC y PP para recuperar la alcaldía.

El 28 de mayo vuelve a haber elecciones, y Matilde Zambudio y Patricia Hernández han decidido que es la oportunidad para terminar el trabajo que ambas empezaron en 2019. Al menos, así explica la aún portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Santa Cruz su paso a las filas del PSOE, donde concurrirá como independiente, en el puesto número cinco de la lista.

Asegura que se va de Cs porque “todos teníamos muchas expectativas con la refundación, pero el cambio que esperábamos no se dio”. Así que, tras hablar con Patricia Hernández, “ambas coincidimos, como lo hicimos en 2019, en que podíamos empezar a trabajar para terminar aquello a lo que le pusimos los cimientos entonces”. Matilde Zambudio detalla a DIARIO DE AVISOS esta decisión y lo que espera de las próximas elecciones.

-¿Qué la lleva a tomar la decisión de dejar Cs e incorporarse a la candidatura del PSOE?

“La decisión de dejar Cs se produce ya hace unos meses. Todos teníamos muchas expectativas con la refundación cuando se anunció a finales de noviembre. Nosotros esperábamos que se diera un verdadero cambio en el partido, no solo de imagen, sino también a nivel de estructura y organización interna. Sin embargo, vimos que esos cambios no se producen, y es entonces cuando tomo la decisión, fundamentalmente porque lo que no se puede hacer nunca es ir a una campaña electoral con desilusión. Para mi es muy importante ir creyendo en tu proyecto porque entiendo que esa es la mejor forma de sacar el mejor resultado posible”.

-¿Es entonces cuando habla con Patricia Hernández?

“Cuando da esa situación en Ciudadanos, donde no se van a producir los cambios que esperaba, es cuando decido que Cs es un proyecto para mi que ya no me representa, y es cuando se lo comunico a Patricia Hernández. En ese momento hablamos de si podemos ir juntas para finalizar lo que empezamos en 2019. No hay que perder de vista que cuando estuvimos gobernando, teníamos el mismo diagnóstico de las necesidades de la ciudad y teníamos el mismo modelo de ciudad. No hubo ninguna discrepancia en cuanto a posicionamiento de lo qué necesitan los chicharreros. Por tanto considero que este paso es terminar o empezar a trabajar en esos cimientos que se pusieron en 2019 y en los que coincidíamos plenamente”.

-¿Como la han recibido en el PSOE?

“Muy bien, no habido ningún tipo de complicación”.

-Según la lista que ha presentado Patricia Hernández, usted ocupa el quinto puesto, ¿negoció ir en este lugar?

“No. Eso es algo que ni siquiera se negoció. Cuando hablé con Patricia, las dos llegamos al acuerdo de que, como ya dije, podíamos ir juntas para culminar lo que empezamos en 2019”.

-¿Seguirá como portavoz de Cs hasta las elecciones?

“Lo que se va a hacer en Santa Cruz es lo mismo que con otros cargos públicos que ya han comunicado que no van a continuar. No hay que perder de vista que además yo me incorporo al PSOE como independiente. Seguiré cumpliendo como cometido como portavoz de Cs, formación con la que no hay ningún conflicto. Cada uno toma sus decisiones a nivel personal, y cada uno seguirá su camino a partir del 28 de mayo, que ya nos separamos”.

-Habla de terminar un proyecto en el que coincidía plenamente con Patricia Hernández, ¿cuáles son los principales puntos que la unen al programa del PSOE?

“Lo que nos une es el ya está bien de la situación de abandono del municipio. No hay ninguna de las áreas del Gobierno municipal que tenga un aprobado raspado. Tenemos suspenso en limpieza, accesibilidad, movilidad, en aparcamientos, en cultura… Me encantaría poder decir lo contrario, poder encontrar un área que sobresalga y decir oiga se lo aplaudo, pero no es el caso. Nos enfrentamos a una situación de abandono de los barrios continuada en el tiempo, unos espacios en los que, en su momento, se hizo un grandísimo esfuerzo para dotarlos de infraestructuras y servicios, y ves ahora que todo eso no se ha mantenido, atendido, ni cuidado. La verdad es que da muchísima pena. Santa cruz es un reto porque tiene todos los condicionantes para ser una ciudad del top ten en España, lo que le hace falta es gestión. Y eso lo vemos años tras año cuando no se molestan en ejecutar las inversiones, el año pasado fue escandaloso, dejando sin ejecutar el 80% del capítulo VI, el de inversiones. Evidentemente lo que tenemos es el resultado del poco trabajo que se ha venido haciendo en los última década en el municipio”.

-Son muchas las críticas que está recibiendo por su paso al PSOE, aunque sea como independiente. ¿Cómo defiende que haya sido el PSOE y no otro partido, como por ejemplo el PP, con el que Cs gobierna en otros puntos de España?

“Yo me afilie a Cs en 2015, y cuando lo hice Cs era un partido socialdemócrata. El cambio de postura política del partido se produce en 2018. Tenemos que tener en cuenta todo aquello en lo que converge un partido de centro como era Cs, con posturas tanto con la izquierda como con la derecha. Me refiero a que no me voy de un extremo a otro o cambio de posicionamiento de forma radical. Estoy de acuerdo que no se entendería que ahora me fuera a un Vox o un Podemos, pero eso era una de las ventajas que tenía Cs como partido de centro, en el que convergen muchas políticas de uno y otro lado. Además, en mi caso, estamos hablando de política municipal, donde, al final, de lo que se trata es de gestionar, de pensar qué necesitan los vecinos de Santa Cruz y de tener capacidad de gestión”.

-Sí, pero dependiendo del partido esas políticas se enfocan desde distintas perspectiva…

“Cierto, y en este caso, eso es lo que comparto con el PSOE, su visión de la ciudad, la perspectiva política de lo que ha qué hacer. Se suele decir que las mejores políticas sociales las aplica el PSOE y las económicas el PP. Pero es que en Santa Cruz, precisamente el PP no ha destacado por esa filosofía que se le aplica de, por ejemplo, no subir impuestos. No podemos olvidar que si hay alguien que hay alguien que en estos cuatro años ha subido impuestos ha sido el PP con la subida de la tasa dele agua, que no contentos con lo que determina la Comisión de Precios, quieren subirla un 8%. Frente a esto, el PSOE siempre ha tenido muy claro que el tema impositivo no se iba a tocar. Así que, desde mi punto de vista, a pesar de estar el PP en el equipo de gobierno, al que se le presupone un mayor apoyo a las empresas, aquí hay que trabajar aún mucho para apoyar a las empresas del municipio que son el verdadero motor del municipio. Empresas que tras la crisis del 2008, de las que muchas aún no habían remontado, se han tenido que enfrentar a la pandemia, y son las autónomos y pequeñas empresas las que necesitan apoyo. Por tanto, si se me quiere reprochar el haber escogido al PSOE frente al PP, entre los motivos están estos”.

-En su gobierno, el que compartió con Patricia Hernández, algo que las dos tenían claro era no pactar con CC,¿ es algo que siguen teniendo claro?

“Eso es algo que no hemos hablado. Si me pregunta si hay líneas rojas es algo de lo que creo que no me toca hablar, puesto que solo soy un miembro más de la lista que encabeza Patricia Hernández. Pero, en cualquier caso, insisto, es algo que no hemos hablado”.

-Si antes hablaba de lo que comparte con el PSOE, ¿qué es lo que le aporta Matilde Zambudio a los socialistas?

“Mi experiencia en toda la parte de gestión que desempeñé junto a Patricia Hernández en el equipo de Gobierno con el que comenzó el mandato. En su momento hicimos una buena división para establecer competencias y áreas, y creo que cada una en su papel tuvo muy buena acogida entre los vecinos de Santa Cruz. Yo peleaba mucho por autónomos y pequeñas y medianas empresas, haciendo muchísimo hincapié en levantar nuestro tejido empresarial, y toda esa parte y visión que pueda tener de los distintos sectores económicos del municipio, eso es lo que quiero aportar. También está la parte cultural, en la que empujamos mucho porque era un área prácticamente inexistente. Así que creo que, para todas esas personas indecisas que están descontentas en el municipio, espero que con mi incorporación al PSOE vean que la única persona que pueda sacar adelante esa situación de abandono a la ciudad y levantarla es Patricia Hernández”.

-Los enfrentamientos con el equipo de Gobierno actual son notables en su caso, ¿es consciente usted de esa tensión, a veces incluso superior a la que tiene con el principal partido de la oposición?

“La verdad es que no sé el motivo por el que siempre dirigen hacia mi un ataque directo, ya no por ideario político o posicionamiento, porque en muchas ocasiones coincidimos, pero sí que es cierto que hay un empecinamiento personal conmigo. Hay veces que pienso que no les gusta oírme hablar, no sé si por lo que digo, o por mi acento (risas), pero es abrir la boca y les molesta. Creo que es más porque no les gusta oírme hablar por la contundencia de cómo digo las cosas”.

-¿Cuál cree que es la principal carencia del actual equipo de Gobierno?

“La incapacidad de gestión. Si te paras a pensar en lo qué han hecho en estos tres años y medio, solo se me ocurre el paso de peatones de la Rambla, que por otra parte era un proyecto del Partido Socialista. Además ves la tasa de desempleo y la de exclusión social, la primera 11 puntos por encima de la media nacional, y la segunda que afecta a más de 50,000 personas en una ciudad de 200.000 habitantes, te dan la medida de esa falta de gestión. Son datos demoledores para una ciudad que además no crece en población desde hace años, la gente no ve atractiva la ciudad para vivir. Esa es la herencia del señor Bermúdez”.

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