El Teatro Guimerá de Santa Cruz de Tenerife albergó en la tarde noche de ayer un espectáculo musical, pero también se convirtió en un lugar donde compartir la solidaridad, sobre y ante el escenario. Promovida y dirigida por el tenor tinerfeño Celso Albelo, de la mano de la Asociación Social y Humanitaria Villa Feliz, la gran gala benéfica que se había organizado, que además ha incluido una fila cero para las aportaciones solidarias a través del sitio web del propio teatro, logró llenar el aforo del emblemático recinto escénico capitalino. Las entradas salieron a la venta al precio de 30 euros, aunque se habilitó una remesa de localidades más económicas, de 15 euros en determinadas zonas del teatro.
BANCO DE LECHE
Villa Feliz dedicará la recaudación obtenida a impulsar el primer banco de leche en Canarias y también a desarrollar otras iniciativas dirigidas a menores en situación de vulnerabilidad. Dichos recursos económicos se suman a los 38.924 euros (su mayor aportación a un proyecto, gracias a la recaudación de su Encuentro Solidario en San Miguel de Abona) destinados al Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria para la adquisición de una máquina pasteurizadora, un paso imprescindible para la creación del banco de leche, el proyecto que dirige el jefe del servicio de Pediatría, Jorge Gómez Sirvent, que tenía previsto recibir ayer la donación junto a la directora-gerente del centro, Natacha Sujanani, en el Teatro Guimerá.
El Rotary Club de la capital tinerfeña y el Colegio de Médicos de Santa Cruz de Tenerife han sufragado los otros dos elementos que se precisan para crear el banco de leche: una cabina de flujo laminar, por valor de 3.680 euros, y el software, que ha costado un total de 7.400 euros.
EL COMPROMISO
“Mi compromiso con Villa Feliz es absoluto y soy afortunado de tener como amigos a grandes artistas que se han sumado”, subrayaba esta misma semana en DIARIO DE AVISOS Celso Albelo acerca de un espectáculo que, además del cantante lagunero, incluyó en su cartel al tenor Pancho Corujo, el bajo barítono Simón Orfila, la soprano Carmen Acosta y el pianista Juan Francisco Parra. Junto a todos ellos, los integrantes de la Orquesta Premium de la escuela tinerfeña de música infantil Garrapatea, que ofrece a niños y niñas a partir de los cuatro años la formación necesaria para tocar instrumentos”.
“Todos los años suelo hacer uno, dos o tres conciertos benéficos -explicaba Albelo en la entrevista con este periódico-, porque creo que es mi obligación. Ya que puedo contribuir con el don que se supone que me ha tocado, participar en este tipo de iniciativas supone para mí, como artista y como persona, una necesidad, una de mis mayores prioridades”.
CONTINUIDAD
La gala, una iniciativa que fue concebida con la voluntad de disponer de continuidad en el calendario anual de propuestas culturales y solidarias que se desarrollan en la Isla, fue presentada por el periodista Miguel Ángel Daswani y contó, igualmente, con la participación de Luis López Tejedor, como regidor, y de Rafael García Arribas, uno de los críticos de ópera más reconocidos en nuestro país.
Villa Feliz, una asociación sin ánimo de lucro fundada por un grupo de juristas tinerfeños con el objetivo de promover causas sociales y humanitarias, ha desarrollado desde su creación múltiples acciones solidarias destinadas a niños y niñas que cuentan con necesidades elementales, tanto en la isla de Tenerife como en República Dominicana, país en el que logró adquirir una guagua escolar con el fin de que los pequeños de la provincia de Samaná pudieran ir a la escuela sin tener que caminar para ello hasta 10 kilómetros cada día.