Llegó en 2011 al Ayuntamiento de Santa Cruz, y desde entonces solo ha abandonado el cargo en una ocasión, en 2019, y durante un año, hasta que logró la mayoría suficiente para presentar una moción de censura y arrebatarle la Alcaldía a la socialista Patricia Hernández, que la había conseguido de la mano de Cs y el apoyo externo de Unidas Podemos, ambos partidos hoy fuera del Consistorio capitalino. Ayer, José Manuel Bermúdez, volvió a coger el bastón de mando para seguir siendo alcalde de Santa Cruz durante otros cuatro años, en el que será su cuarto mandato. Y lo hizo gracias al apoyo del PP, que se convierte en su socio favorito, ya que es la tercera vez que le da su apoyo. Los nueve votos de su partido y los cinco del PP de Carlos Tarife lo hicieron posible.
Lo sosegado del ambiente inicial en nada recordó al de hace cuatro años, cuando Hernández tomó posesión como alcaldesa. Aunque lo cierto es que los simpatizantes del PSOE se dejaron notar en el salón de Plenos con aplausos y vítores a sus concejales, especialmente a la exalcaldesa, pero también a ediles como Andrés Martín o a la benjamina del grupo y del Pleno, Alana Chinea, que junto a Cándido Rodríguez, el edil de más edad, presidieron la mesa encargada de entregar las actas a los concejales.
José Manuel Bermúdez recogió el bastón de mando entre aplausos, y acto seguido se dirigió a ocupar la presidencia del Pleno, la misma en la que ya lleva 11 años. En su discurso de investidura, defendió la moción de censura presentada en 2020, calificando de “valiente” a los concejales que dieron el paso adelante para liberar a Santa Cruz del “desgobierno”. Agradeció a los votantes el apoyo. “Frente a la división, al debate de los extremos, en un contexto global de continua riña política, de ruido desmesurado, en Santa Cruz ha triunfado la moderación y la continuidad”.
Una moderación que la presidenta del PSOE y líder de la oposición, Patricia Hernández, no quiso ejercer. Duro discurso el de la exalcaldesa, que reivindicó haber ganado las elecciones, felicitando al alcalde por lograr en el Pleno lo que no logró en ni en las urnas ni en la calle.
Dio la bienvenida a José Alberto Díaz Estébanez (CC) al hablar de los troles de CC. Apuntó que CC quiso ganar las elecciones, “hablando de mis bolsos y vestimenta”, que sería lo mismo, dijo, “que si yo para ganarlas hablara de las alzas y cuñas de los zapatos de otro candidato”.
Hernández apuntó algunas de las cosas que parece haber tenido guardadas desde la moción de censura, como que “usted la justificó diciendo que Santa Cruz no me quería, cómo sienta saber ahora que es a usted a quien no quiere”, interpeló al alcalde. “Usted está aquí porque le obliga el partido”, continuó, y reprochó que tras la noche electoral ni siquiera la llamaran para explorar posibles acuerdos, “aquí no ha pasado nada, circulen”, repitió en lo referente a la rapidez del pacto entre CC y PP. Finalizó arengando a su partido. “Aquí nadie baja los brazos, afrontamos el mandato con más fuerza que nunca”.
Ante un discurso tan duro, Bermúdez no quiso contestar de forma directa. “No voy a descender al barro para contestar los improperios. No va conmigo, no es mi estilo, puede que algunos se sientan cómodo, pero yo no”.
El que será primer teniente de alcalde, Carlos Tarife (PP), inició su intervención apuntando que “hoy acaba uno de los mayores bulos en los que me he visto envuelto. No me afilié al PP para pactar con la izquierda, y hoy se ha demostrado”. Dio la bienvenida a todos los concejales, a los nuevos, incluidos los de Vox y a los que repiten, hizo un breve repaso por las principales líneas de su programa electoral. Finalizó agradeciendo uno a uno a sus concejales el esfuerzo, y a su familia: su madre, su hijo y su pareja.
Por CC habló José Alberto Díaz Estébanez que se perfila como el portavoz municipal del grupo. En un discurso extenso, y comedido, habló de “moderación y estabilidad”. Reivindicó el papel de CC en la historia de Santa Cruz, “con sus luces y sus sombras, con sus aciertos y sus errores” para defender una vez más “la estabilidad”.
Desde Vox, su portavoz, Alejandro Gómez inició su intervención asegurando “Vox apoyará cualquier medida, venga de quien venga, que redunde en el beneficio de la ciudad, pero también rechazará todo aquello, venga de quien venga, que pretenda perpetuar chiringuitos políticos o que vayan en contra del bienestar de los ciudadanos”.

Un mandato que comienza con dureza y desencuentros
Patricia Hernández consiguió ayer, ya se verá si de forma acertada o no, robar algo de protagonismo al alcalde, José Manuel Bermúdez, imprimiendo una dureza a sus palabras que sorprendió a propios y extraños. La exalcaldesa marcó la que parece que va a ser la línea que seguirá desde la oposición en este mandato.
El desencuentro con el que va a ser el nuevo equipo de Gobierno también se trasladó a la foto de la nueva Corporación, de la que el PSOE acabó ausentándose alegando que, primero no se les había comunicado oficialmente que se iba a hacer, y segundo, la colocación no obedecía a la conformación del Pleno, sino a la del equipo de Gobierno que aún no ha está constituido como tal. Desde el Ayuntamiento se asegura que ayer se informó a los portavoces de los grupos que habría foto, informando el PSOE que no acudiría, de ahí la conformación del grupo para la foto. Ayer los socialistas alegaron que no tenían información oficial.
Al término del Pleno, el ya alcalde, apuntó que “hoy hemos visto la peor cara del PSOE, esa que entra y ataca y agrede en lo personal, es la peor versión que hay de un partido democrático como es el PSOE”. “Yo no voy a descender a ese barro -continuó-, no voy a entrar ahí, no me muevo bien en el lodo, a ella, por lo que se ha visto hoy, le encanta acudir a agresiones de carácter personal en un pleno constitutivo de un mandato, lo nunca visto, parece es algo que no le beneficia a ella, ni a la institución”.
En cuanto al desarrollo del Pleno expresó que “he tenido el honor de volver a ser elegido alcalde de esta ciudad, en un mandato que encaro con ilusión y un optimismo extraordinario porque estoy convencido de que va ser el mejor mandato en el que he participado”.
Por su parte, Carlos Tarife, apuntó que “no voy a dedicarle ni un minuto más. A partir de mañana tenemos la obligación de ser un único de gobierno, que apoyará cualquier iniciativa que sea para mejorar va a contar con el apoyo del grupo de gobierno, pero si lo que traen es ruido, vamos a tratar de apagarlo con gestión y con muchísima democracia”.