El reconocido periodista Bernardo Carrión ha compartido el calvario que está viviendo después de recibir una multa de 200 euros por estacionar su vehículo en una plaza libre y encontrarse tras varios días que el sitio fue pintado después como reservado para personas con discapacidad en Valencia. Carrión compartió su experiencia en un hilo de Twitter, donde detalló los eventos que llevaron a esta situación surrealista.
El incidente ocurrió cuando el periodista utilizó el viejo Opel Corsa de su tía como coche auxiliar y estacionó en la calle Almirante Cadarso, en pleno Ensanche valenciano. Para su sorpresa, al regresar una semana después, descubrió que habían pintado una plaza para discapacitados debajo de su vehículo y que había sido multado.
Carrión explicó en su relato que había aparcado en una zona blanca (gratuita), donde solía estacionar su coche sin problemas. Lograr ese sitio libre le hizo sentir que había ganado la Primitiva, ya que debido a los cambios recientes en las regulaciones de estacionamiento en el barrio de Russafa, adyacente al Ensanche, ahora se requería una tarjeta de residente para aparcar en la zona naranja y es muy difícil estacionar sin pagar en la zona.
El afectado compartió fotografías en las que se mostraba claramente la plaza de aparcamiento para personas con discapacidad recién pintada, incluso con la rueda de su coche afectada por la pintura. Carrión expresó su desconcierto ante la falta de señalización previa que indicara la futura instalación de la plaza para discapacitados.
Las explicaciones de las autoridades ante la multa
Desesperado por encontrar una explicación, Carrión se puso en contacto con las autoridades municipales, pero recibió respuestas contradictorias. Inicialmente, la Policía Local de Valencia afirmó no tener registro de la denuncia, lo que llevó al periodista a pensar que el agente responsable de la multa podría haber dejado el boletín en blanco debido a la injusticia de pintar una plaza debajo de su vehículo sin previo aviso.
Sin embargo, esta semana Carrión recibió una notificación oficial por correo que confirmaba la multa de 200 euros por una infracción grave, que se reduciría a 100 euros si pagaba dentro de los próximos 20 días. Ante esta situación, el periodista se dirigió directamente al Ayuntamiento de Valencia, solicitando una explicación clara y una solución para este malentendido.
Carrión concluyó su hilo de Twitter pidiendo al Ayuntamiento de Valencia que le indicara los pasos necesarios para resolver el problema ocasionado por la multa. La historia ha generado una amplia repercusión en las redes sociales, con muchos usuarios mostrando su apoyo al periodista y cuestionando la actuación de las autoridades municipales en este caso.