En pleno siglo XXI, resulta difícil de creer que aún existan construcciones enigmáticas sobre las cuales no se sabe absolutamente nada, a pesar de toda la documentación, tecnología y conocimientos de los que disponemos, más cuando se trata de un verdadero pozo sin fondo.
Uno de estos enigmas se encuentra en el pueblo de Tonnerre, Francia, donde los habitantes llevan siglos intentando descubrir el origen del impresionante caudal del manantial Fosse Dionne, en español sería algo así como pozo divino, ubicado en el centro de la ciudad.
Este pozo aparentemente insondable ha desconcertado a las civilizaciones antiguas, y hasta el día de hoy no se ha logrado descifrar de dónde proviene semejante cantidad de agua.
Aunque los romanos fueron los primeros en documentar la existencia del pozo y construir una civilización a su alrededor, nadie ha logrado determinar su nacimiento. A pesar de esto, los habitantes de Tonnerre han utilizado el agua del manantial en su vida diaria durante siglos.
No obstante, los romanos no fueron los únicos en encontrar este pozo. A lo largo de los siglos, los celtas lo consideraron una fuente de agua sagrada, mientras que más tarde los franceses lo utilizaron como una piscina pública. Resulta casi incomprensible que, hasta el día de hoy, nadie haya logrado descubrir su origen.
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— Yasmine Queen💎 (@QueenYasmine155) January 25, 2023
Un pozo sin fondo marcado por la muerte
Todos los intentos de bucear en los estrechos pasadizos del pozo han fracasado, e incluso tres buceadores perdieron la vida en el intento de llegar al final del manantial. Dos de ellos fallecieron en 1974 y el tercero en 1996.
Los esfuerzos por descubrir su origen han llevado a la comuna a contratar a buceadores para sumergirse en sus aguas en busca de respuestas, una misión sumamente peligrosa. Hasta ahora, incluso los buceadores más experimentados no han logrado completarla.
Aunque los habitantes de Tonnerre aún no hayan conseguido desvelar el misterio, el manantial se ha convertido en un punto de interés que atrae a miles de turistas.
Sin embargo, debido al peligro y al riesgo que implica que un buceador intente sumergirse en sus aguas, los intentos por descubrir su misterioso origen se han suspendido por el momento.
La Fosse Dionne (Tonnerre) es una surgencia kárstica cuyo origen se desconoce, tras varias expediciones con resultados trágicos.
— Samuel Biener (@samuel_biener) December 14, 2021
Sólo se conocen los primeros metros, como se aprecia en esta imagen. pic.twitter.com/QFMPkZbldz
