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Sánchez, en La Mareta al calor del sofoco político

El presidente del Gobierno en funciones se sacude el agobio de la investidura en la residencia de vacaciones de Lanzarote, donde se aloja con su familia desde el lunes
Pedro Sánchez y Begoña Gómez, con La Mareta al fondo en un fotomontaje.
Pedro Sánchez y Begoña Gómez, con La Mareta al fondo en un fotomontaje. DA

Pedro Sánchez se encuentra descansando, desde el lunes, en la residencia de La Mareta. La presencia del presidente del Gobierno en funciones con su familia en Lanzarote ha sido tan sorpresiva como la escapada a Marruecos de la semana pasada, cuando se daba por hecho que ya estaba instalado en Costa Teguise. Poco o nada se conoce de la agenda privada y tampoco constaba hasta ayer ninguna actividad institucional de cortesía, algo que sí solía hacer a modo de saludo con Ángel Víctor Torres, anterior jefe del Ejecutivo canario, y Dolores Corujo, expresidenta del Cabildo y hoy diputada electa en el Congreso.

Al secretario general del PSOE, aspirante a una nueva investidura, lo acompañan su esposa, Begoña Gómez, sus dos hijas (Ainhoa y Carlota) y la perra Turca. El palacio de La Mareta fue un regalo de Huseín de Jordania al rey Juan Carlos en 1989 y cedido a Patrimonio Nacional. La Familia Real ha frecuentado La Mareta como lugar de vacaciones. Lo hizo por vez primera en abril de 1993, tras la muerte del conde de Barcelona. En esta residencia murió, el 2 de enero de 2000 la madre de don Juan Carlos, María de las Mercedes. Allí recibieron el Año Nuevo, después de pasar la Navidad en el palacio de la Zarzuela. También se han hospedado los presidentes del Gobierno José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y el propio Pedro Sánchez. Previamente se alojó el entonces canciller de Alemania, Helmut Kohl, con motivo de la cumbre hispano-germana de 1992. En agosto de ese año, el expresidente de la URSS Mijaíl Gorbachov y su esposa, Raisa, lo ocuparon durante tres semanas. Luego, el canciller alemán Gerhard Schröder, el presidente checo Václav Havel, José María Aznar; el vicepresidente Rodrigo Rato, el presidente de Kazajistán Nursultán Nazarbayev, José Luis Rodríguez Zapatero y, en diciembre de 2005, los príncipes de Asturias y su hija Leonor por Navidades. En ese mismo lugar celebró Sánchez la Nochevieja de 2018.

Esta moderna casa-palacio a orillas del mar en la localidad de Costa Teguise, en el municipio de Teguise, la mandó a construir el rey hachemí a finales de los años 70 del siglo XX, con diseño del arquitecto Fernando Higueras y el artista lanzaroteño César Manrique. Su nombre procede de una mareta (aljibe) que servía para recoger el agua de lluvia y como bebedero de animales. Curiosamente, Huseín jamás se alojó. Uno de los hijos del monarca jordano estuvo después de su boda.

Para regocijo de un aficionado al baloncesto, hay una cancha. La superficie alberga diez bungalós, de una y dos plantas de altura; el principal, con dos dormitorios, una piscina y terrazas. Dispone de un gimnasio, dos piscinas más, una pista de tenis, y una extensa zona ajardinada con un lago central.

En 2015 se cumplió el deseo de Felipe VI de que La Mareta se aprovechara para promocionar el turismo. El 2 de diciembre, en los jardines, el ministro de Industria, Energía y Turismo, el grancanario José Manuel Soria -una cartera con similares competencias la lleva en la actualidad el tinerfeño Héctor Gómez-, y el presidente de Patrimonio Nacional, Alfredo Pérez de Armiñán y de la Serna, firmaron un convenio a tal efecto. El documento establecía que la Secretaría de Estado de Turismo compensaría a Patrimonio Nacional con 2.500 euros por cada día de actividad, aparte de los gastos por la limpieza de las áreas que se utilicen y la reposición de los eventuales desperfectos.

Allá por 2020, Pedro Sánchez inició las vacaciones estivales en medio de la convulsión causada por la decisión del rey Juan Carlos de mudarse al extranjero -ha regresado tres veces y piensa repetir siempre que le sea “posible”- y los rebrotes del coronavirus. En esta ocasión repone fuerzas para afrontar la materialización del veredicto de las urnas en las elecciones generales del 23 de julio. Sánchez se ve con más opciones que Alberto Núñez Feijóo.

Los otros emplazamientos idílicos para descansar

Los presidentes de Gobierno suelen desplazarse a emplazamientos idílicos en España para descansar; especialmente dedicadas a funciones de representación institucional del Estado, como La Mareta, Las Marismillas (Huelva) y Quintos de Mora (Toledo). En noviembre de 1987, José María Aznar acudió a la casona de Lanzarote en el contexto de un Consejo de Ministros en Tenerife. No lejos, sin salir del municipio de Teguise (urbanización Famara Bungalows), José Luis Rodríguez Zapatero compró en agosto de 2017 una villa de 1.329 metros cuadrados valorada en 1,2 millones de euros, junto a su esposa, Sonsoles Espinosa.

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