Muchas personas sueñan con ganar la lotería para poder dejar de trabajar. Pero lo cierto es que las probabilidades de que esto ocurra son extremadamente bajas. De hecho, la posibilidad de que ganes el primer premio, por ejemplo, en el sorteo del Euromillones, es de 1 entre 139.838.160.
Y entre esos afortunados se encuentra el conductor de guaguas James Keown, quien ganó 100.000 dólares en el Powerball, una las loterías más populares en Estados Unidos. El caso es que, tal y como detallan algunos medios locales, Keown se vino arriba y le mandó un mensaje a su jefe: “Me ha tocado la lotería y no volveré”.
El veterano conductor de guaguas “amaba” su trabajo, pero consideró que podía jubilarse tras 11 años como chófer para el Distrito de Escuelas Públicas del Condado de Jefferson.
Su esposa, que se llama Monta, confesó que estaba muy contenta por su marido. “Acabamos de hablar por teléfono y me envió un mensaje de texto para que lo llamara tan pronto como pudiera. Entré en pánico al pensar que algo andaba mal”. Todo lo contrario.