La Fundación CajaCanarias, en colaboración con la Agencia EFE, presentó ayer lunes la propuesta expositiva Rostros de la Guerra Civil en la Facultad de Educación de la Universidad de La Laguna (ULL), que inaugura con esta muestra su sala de exposiciones, en la calle Heraclio Sánchez, 43.
La muestra, que va a estar abierta al público hasta el próximo 15 de diciembre, está conformada por una selección de 20 impactantes imágenes pertenecientes al archivo fotográfico de la Agencia EFE. Su objetivo es poder acercar a cuantos la visiten un conflicto que tuvo lugar en nuestro país entre 1936 y 1939, pero marcó, para siempre, el devenir contemporáneo de España.
El horario de visitas de Rostros de la Guerra Civil es, de lunes a viernes, de 10.00 a 13.30 y de 17.00 a 19.30 horas. Toda la información sobre este proyecto se encuentra ya disponible a través del sitio web de la fundación, www.cajacanarias.com.
El acto inaugural, celebrado en la mañana de ayer, contó con la presencia de Francisco Javier García, rector de la Universidad de La Laguna (ULL); Esperanza Ceballos y José Farrujia, decana y vicedecano de la Facultad de Educación, respectivamente; Isabel Castells, directora de secretariado del Vicerrectorado de Cultura, y Óliver González, director general de la Fundación CajaCanarias.
EL ARCHIVO
Rostros de la Guerra Civil es una muestra conformada por interesantes documentos del archivo fotográfico de la Agencia EFE, que permiten acercar al visitante a un conflicto bélico que fue absolutamente determinante para la España de la época contemporánea. Con este proyecto expositivo que se instala en la Universidad de La Laguna, la Fundación CajaCanarias ofrece, una vez más, la oportunidad de reflexionar acerca de valores colectivos sobresalientes, “consciente del papel esencial con el que cuenta la cultura en el desarrollo de sociedades más fraternas, pacíficas y tolerantes”.
Contemplar, con la perspectiva del tiempo, las instantáneas tomadas por unos y otros fotógrafos entre los años 1936 y 1939, casi 85 años más tarde del final del conflicto, que daría paso a una dictadura, suscita la reflexión sobre el necesario afianzamiento de los valores que promueven la paz.
VENCEDORES Y DERROTADOS
Este conflicto del siglo XX tuvo en la fotografía el sustituto de los grandilocuentes óleos de guerras pasadas, donde la poética de vencedores y vencidos entablaba auténticas visiones irreales de los hechos. Es en el trabajo de los corresponsales de guerra, en sus fotografías documentales, donde el terror del enfrentamiento bélico queda patente y, aunque pasada por el filtro de cada objetivo, donde la realidad se hace más cruda.
Desde esta visión se desarrolla una de las claves del discurso de la muestra: la objetividad de los hechos confrontados en la imagen fotográfica de cada reportero de guerra, cuestión esencial para analizar un tema tan trascendental como crítico.
Desde el punto de vista artístico, Rostros de la Guerra Civil es un acercamiento a un tipo de documento gráfico que, en ocasiones, no deja de lado las capacidades estéticas del autor, quien, en circunstancias dramáticas, es capaz de continuar buscando la belleza en lo que podríamos llegar a denominar poética de lo terrible: miradas elocuentes o paisajes destruidos donde se funden las ansias creativas y cualidades técnicas de cada fotógrafo, con el grito sordo del pueblo.