sociedad

Usuarios de X animaban a un niño tinerfeño a autolesionarse y publicarlo

Recibía a través de las redes consejos de dónde cortarse para producirse el desmayo, sus padres y amigos no se dieron cuenta; un compañero de Instituto alertó de su conducta
Los padres piden no bajar la guardia y poner límites al acceso a internet y las redes sociales para evitar repetir su desgarradora experiencia. DA

Dos padres tinerfeños denuncian en DIARIO DE AVISOS la desprotección e inseguridad de los menores en internet al reconocer cómo muchos usuarios de la red social X, anteriormente Twitter, informaban y animaban a su hijo de cómo podía autolesionarse y le incitaban a publicarlo.

El menor buscó información de cómo autolesionarse, y según las pruebas de la familia (mensajes, conversaciones y capturas de imágenes, bastante duras) otros usuarios de X le decían cómo se tenía que hacer daño para que sus padres, familiares o amigos no se dieran cuenta, o en que lugar exacto herirse para llegar a producirse el desmayo.

Un compañero de clase identificó a principios de 2023 al menor en alguna foto o vídeo de sus publicaciones y lo comentó a sus padres, que ante esta grave situación dio parte a su Instituto, ubicado en Santa Cruz de Tenerife, que alertó a la familia.

Matías (nombre ficticio del padre) afirmó que “ignorábamos que nuestro hijo se estuviera autolesionando. No le dimos importancia a que siempre vistiera con camisetas de manga larga o que se pusiera un suéter, aunque hiciera calor. Nunca notamos nada extraño, realizaba una vida normal, en los estudios sacaba buenas notas y nada hacía presagiar que tenía problemas mentales”, afirmó.

El progenitor asegura que “los usuarios de X le explicaban dónde hacerse los cortes, o cómo podía darse golpes para que no se notaran, otros pedían imágenes o videos explícitos de las heridas en el cuerpo. Incluso mi propio hijo en alguna ocasión hacía una encuesta de varios lugares para hacerse cortes y pedía opinión de cuál elegir”.

Reconoce que su niño, ahora con 15 años, lleva varios meses en tratamiento psicológico y lo está sobrellevando bien. “En noviembre ha dejado de autolesionarse y nos ha prometido que no lo volverá a hacer”. Según el psiquiatra que lo está atendiendo este comportamiento autolesivo “se debió a ansiedad y otras cosas que le preocupaban”.

El progenitor cree que esta situación pudo generarse a raíz de la pandemia y, por tanto, es importante darlo a conocer “para que otros padres se den cuenta de que las redes sociales no tienen ningún seguro para nuestros hijos y tampoco están dispuestos a controlar cualquier tipo de actuaciones de nuestros menores”. Recalcan que “hemos experimentado algo desgarrador y no queremos que le suceda a otras familias. También podemos ayudar a otros jóvenes que se autolesionan o que podrían están en riesgo”.

Por último, pidió a las familias “no bajar la guardia y poner normas y límites al acceso a internet y las redes sociales de sus hijos”. En su caso, cuando era más pequeño, le controlaba el acceso a internet en casa a través de Family Link, “pero al hacerse más mayor y comenzar a tener móvil ese control se perdió y reclamaba tener su intimidad”.

Inseguridad

Sergio Díaz, director del Observatorio de Delitos informáticos de Canarias (ODIC) reconoció que varios padres y madres han recurrido a su organización como último recurso ante “la desesperación y la inseguridad de sus hijos e hijas”.

“El problema es que los menores están desprotegidos y las familias se enteran tarde, cuando sus hijos están sufriendo estas conductas. Es decir, viviendo en la misma casa no se habían percatado, y hay que tener mucho cuidado”.

Según pudo investigar Díaz “había muchas interacciones y mucha gente aportando sugerencias, comentarios y viendo como los menores se autolesionan e incluso se jugaban la vida”. “Esto también es un peligroso estímulo para los propios menores que ven cómo otros se involucraban en su historia”. Además, calificó de desgarradoras las imágenes de los cortes y autolesiones que se afligía este menor.

Asimismo, la familia se ha sentido desprotegida por el sistema. “Nos dicen que no han encontrado apoyo en la Policía Nacional y su ineficacia a la hora de proteger y garantizar la seguridad de los menores en las redes”.

Alarma

Un estudio elaborado por la Universidad del País Vasco en 2019 sobre la incidencia de los riesgos de internet en 3.000 adolescentes afirmaba que hasta el 45% de menores de entre 14 y 17 años habían visitado webs que enseñan a autolesionarse.

Entre los motivos principales se encontrarían la soledad que sienten muchos jóvenes, el efecto contagio, enfermedades mentales como la depresión, la ansiedad, la incapacidad de resolver sus problemas y el abandono emocional, lo que les llevaría a sentir un cierto consuelo en las autolesiones.

Por su parte, la Fundación ANAR de ayuda a Niños y Adolescentes viene alertando desde hace más de 15 años del gran incremento de búsqueda de información para autolesionarse o la ideación de suicidio. “Lo que comenzó como una moda en internet, se ha convertido en una alarma”, aseguran.

Las autolesiones se han multiplicado por 56, recibiendo en su teléfono confidencial y gratuito para menores 3.200 casos en 2021 por los 57 de 2009. Las consultas por intentos o ideas suicidas y autolesiones se multiplicaron por 19 en los últimos 10 años, cerrando 2021 con 7.770 peticiones de información y 4.542 menores atendidos.

TE PUEDE INTERESAR