El dramaturgo José Padilla (Santa Cruz de Tenerife, 1976) ha sido designado para dirigir la gala de los 27º Premios Max de las Artes Escénicas, que tendrán lugar el 1 de julio en el Auditorio de Tenerife. El creador tinerfeño, ganador de dos de estos galardones [en 2017, por Historias de Usera, un texto en el que compartió dramaturgia con Alfredo Sanzol, Miguel del Arco, Denise Despeyroux, Alberto Olmos y Alberto Sánchez-Cabezudo; y en 2019, por Dados], asume la dirección y creación de la ceremonia como “una responsabilidad enorme, pero una responsabilidad bellísima”, subraya.
“Echo la vista atrás y me doy cuenta de la relevancia que los Max han tenido en mi trayectoria. Como candidato, como finalista o como ganador, y siempre, siempre, ha sido un acto de calidez y comunión con la profesión. Quién me iba a decir a mí que iba a terminar dirigiendo una gala… Y aquí estoy”, argumenta el autor y director teatral.
Para Padilla, dirigir la gala de entrega en su ciudad natal “es un sueño que ni siquiera sabía que podía tener, y se va a hacer realidad”. “He visto siempre la ceremonia como un homenaje a todos los compañeros y compañeras que nos dedicamos a las artes escénicas, un lugar de encuentro y de reconocimiento, de sabernos uno. Es, por lo tanto, un reto, todo un desafío; pero qué desafío tan grato”, asevera.
Organizados por la Sociedad General de Autores y Editores, a través de la Fundación SGAE, los galardones cuentan con el patrocinio del Cabildo de Tenerife; la colaboración del Ministerio de Cultura y Deportes, a través del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (Inaem), y el apoyo de Grupo Eulen y AENA. La gala se retransmitirá por La 2 de RTVE, a través del Canal Internacional de RTVE y de RTVE Play.
EN EL CENTENARIO DE ÁNGEL GUIMERÁ
“Justo en julio, cuando tendrá lugar la ceremonia, se cumplen 100 años del fallecimiento de Ángel Guimerá (Santa Cruz de Tenerife, 1845-Barcelona, 1924), una figura que reúne dos condicionantes tan particulares como ser un tinerfeño universal, el teatro más antiguo de Canarias lleva su nombre y fue un absoluto enamorado de su tierra hasta el fin de sus días, aparte de ser el padre del teatro catalán”, apunta Padilla.
“Es alguien que hay que reivindicar: por la importancia que tiene y lo contemporáneo que resulta leído hoy; aportaremos nuestro granito de arena. Alrededor de su figura, brindaremos con espectadores y creadores, desde Canarias a Cataluña, desde Andalucía a Galicia, para que nunca se apague la llama de la creación”, concluye.