David García coge pequeños puñados de arena blanca entre sus manos y los esparce cuidadosamente sobre la flor que queda por terminar. A su lado, y bajo una gran carpta, Ezequiel de León realiza la misma tarea pero con arena de color negro, ya que prepara el fondo para la figura que falta, la que refleja la muerte.
Ambos ultiman bajo la supervisión de Domingo González, los últimos trazos del Magno Tapiz de la Plaza del Ayuntamiento en honor al Corpus Christi, elaborado con arenas naturales del Parque Nacional del Teide.
Lo hacen casi en silencio, ante la atenta mirada de decenas de personas que se acercan a contemplar y fotografiar un trabajo meticuloso, cada uno concentrado en ese pequeño espacio que en su conjunto representa ‘Las puertas del cielo’, el tema de este año.
Un cielo de diferentes colores y tonalidades que encamina hacia la fe y la humanización de las personas, a la transformación del odio que lleva a las guerras y a la violencia, en empatía y humildad. “Es un lugar al que nos gustaría llegar a todos, probablemente, que no sabemos cómo es, y por eso la ficción de un cielo compartimentado pero abierto a la vez, con espacios separados por líneas blancas que simulan la pureza mientras grandes ángeles custodian a un grupo de ángeles pequeños que juegan con las nubes y se divierten”, explica González.
De esa manera, el director ha querido mostrar cómo los niños, niñas y jóvenes deben disfrutar de su infancia, su inocencia y su juventud y crecer siempre arropados y protegidos por alguien, en este caso, por los adultos.
Los ángeles pequeños fueron elaborados por los más jóvenes del grupo, quienes nunca habían hecho una figura humana, “con lo cual es un hándicap bastante complicado y eso hay que valorarlo muy bien”, apunta el director.
De los más grandes, ubicados a los lados, se encargaron cinco manos diferentes “y eso tiene su complejidad y es el valor de un trabajo hecho en equipo”, subraya González.
Se refiere a las 17 personas -la más joven tiene 14 años- que desde hace dos meses hacen verdaderas maniobras con sus trabajos y estudios para poder compatibilizarlos con la elaboración del Magno Tapiz. A excepción de él y Ezequiel que están fijos porque trabajan en la Escuela Municpial de Arte Perdigón y en el Ayuntamiento, acuden cuando pueden, aunque cada minuto se agradece.
Es casi imposible calcular las horas de arte que le dedica cada una al Santísimo, pero las de todo el equipo podrían rondar las 3.000 en los casi dos meses desde que se empezó a elaborar la alfombra.
Según González, cada proceso del trabajo tiene sus dificultades. “Las figuras grandes son bastante complejas y para eso hay dos grandes maestros que han estado trabajando en ello, como son Ezequiel y Jesús Bautista Trujillo, a quienes se suma David, una de las mejores manos que se dedican a hacer flores”, explica. Estos dos últimos alfombristas cumplen este año medio siglo dedicados al Magno Tapiz.
“Hay detalles que la gente no quiere valorar mucho, pero que están por obligación y por necesidad, ya que para que una cara luzca mucho tiene que tener el conjunto de alrededor muy bien planificado”, precisa.
Faltan cinco días para el jueves del Corpus Christi, para que la Villa presuma de su arte efímero más internacional y el Magno Tapiz está prácticamente acabado a falta de algunos detalles y pequeños inconvenientes que se han ido solventando, como la escasez de color amarillo y verde. “Es complicado traerlo de donde se tiene que extraer pero teníamos reservas y hemos podido aguantar bastante bien”, indica González.
El poder contar con una gran carpa, la mayor de la historia, que cubre toda la plaza les ha facilitado el trabajo a los alfombristas y les ha dado más seguridad, ya que a medida que se avanza en el desarrollo del diseño se puede comprobar la evolución. “Es más cómodo y más seguro porque no cae agua y eso hace que avancemos bastante hasta un punto bastante interesante de ver la alfombra prácticamente acabada”, sostiene el director.
El año pasado un chaparrón de horas destrozó casi dos tercios de la gran alfombra, un trabajo que no se pudo recuperar y un daño que en esta ocasión se ha intentando evitar.
“Por eso es importante tener casi todo el trabajo listo, porque la carpa se retirará el martes ya que hacerlo también requiere tiempo, y es muy poco el que queda para rematar los exteriores del tapiz”, asegura González.
Aunque este año el pronóstico del tiempo también apunta a la posibilidad de lluvias para el miércoles, si el cronograma del director se cumple, el Magno Tapiz podrá estar finalizado antes de lo previsto.
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