La inteligencia artificial generativa está pensada para crear contenidos en forma de texto, audio, imágenes o vídeos. Su ámbito de aplicación es muy extenso: se puede utilizar para elaborar una historia corta basada en el estilo de un autor en particular, una representación visual realista de una persona inexistente, componer una sinfonía inspirada en un músico famoso o un videoclip a partir de una descripción simple. Entre sus diversas habilidades, diseña asistentes virtuales con respuestas similares a las humanas. Su capacidad innovadora está revolucionando la gestión empresarial: impulsa la transformación, automatiza tareas creativas y brinda experiencias de cliente personalizadas. Muchas compañías lo ven como una herramienta poderosa.
Uno de los principales productores mundiales de soluciones informáticas para procesos de negocio, SAP, identifica como desafíos en el desarrollo de IA generativa “una serie de preocupaciones técnicas y éticas que deben abordarse a medida que la tecnología se va adoptando más ampliamente”.
Un estudio de Logitech y The Futurum Group, una firma global de investigación independiente, enumera las tendencias emergentes en la modernización del lugar de trabajo mediante la inteligencia artificial y el análisis predictivo. Revela que estos instrumentos se tornarán en prioridades de inversión en los próximos años.
De hecho, se prevé que, para 2027, supere los 10.000 millones de euros. Mejorar la experiencia del usuario en entornos de trabajo híbridos y remotos constituye uno de los retos. De este informe se desprende que el 70% de los empleados transmite que la tecnología que le proporciona su empresa no supera sus expectativas. En este escenario, la sinergia entre la IA y la experiencia del usuario se presenta como clave. El provecho de equipos tecnológicos punteros no solo potencia la concentración y los procesos, sino que se traduce en un servicio de mayor calidad y en la retención del talento.
Un factor esencial en este contexto es la eliminación de reuniones ineficientes, probablemente el principal obstáculo para la productividad. Al respecto, adoptar la IA modifica estas dinámicas, lo que redundará en una mayor eficiencia y destreza para resolver problemas complejos. “Estamos en un punto de inflexión en el que la inteligencia artificial facilita las tareas rutinarias y desempeña un papel crucial en la configuración de un entorno laboral más satisfactorio”, expone Nolwenn le Querré.
En cuanto a la reconfiguración del mercado laboral, un análisis del FMI vaticina que casi un 40% del empleo mundial está expuesto (un 60% en las economías avanzadas). De una investigación de Google Cloud se extrae que la inteligencia artificial generativa fortalece la musculatura empresarial: incrementa los ingresos hasta un 6%.
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