La mano de Pepe Mel empieza a hacerse visible. En el tercer partido del preparador madrileño como entrenador blanquiazul, el CD Tenerife logró la primera victoria de la temporada. Los goles del canterano Dani Fernández, en la primera parte, y de Enric Gallego, en la recta final, se convirtieron en la primera piedra que pone en el camino el equipo tinerfeño para lograr salir de los puestos de descenso.
Hasta seis novedades introdujo Mel en el once inicial con respecto a la formación que jugó en Castalia. Gayá, Medrano, Diarra, Dani, Marlos y Ángel participaron de entrada.
Los primeros minutos fueron para el equipo blanquiazul, que empezó las hostilidades buscando a un insistente Marlos Moreno, quien una y otra vez buscaba encarar a su contrario.
Justamente la primera acción de peligro real para la meta cartagenera la culminó el colombiano. Trató de salir a la contra el cuadro visitante, pero cortó Mellot con la mano. El colegiado no lo apreció y dejó seguir, llegando la pelota a un Luismi Cruz que logró centrar atrás para que Marlos rematase. El VAR avisó a Orellana Cid para ver la jugada en el monitor. Tras visualizarla, el tanto fue anulado y, encima, el lateral derecho fue amonestado.
No pasó mucho en los siguientes minutos. Se le acabó la gasolina a Marlos y desapareció el equipo en ataque.
No volvió a conectarse hasta que en el minuto 35 Luismi Cruz recuperó una pelota en ataque y salió rápido a buscar el área murciana. Le dio tiempo a levantar cabeza y dar un pase al hueco en el que apareció sorpresivamente Dani Fernández, quien logró conectar un cabezazo picado abajo que se coló en la meta defendida por Campos. Golazo del canterano, el primero en su carrera, que se quedó tendido en el suelo nada mas rematar tras chocar, cabeza con cabeza, con Alcalá. Los dos se quedaron noqueados y tuvieron que abandonar el campo.
Los minutos finales del primer acto se saldaron con dos disparos de los locales. Uno de Marlos y otro de Mellot. Ninguno con consecuencias para la meta del Cartagena.
La segunda parte arrancó sin cambios y con un Cartagena que intentó dar un paso adelante en la presión. No lo consiguió. El Tenerife se mantuvo bien plantado y apenas pasó apuros.
El cuadro murciano se mostró como un equipo lento que llegaba tarde a casi todas las jugadas. Por eso fue amonestado Luis Muñoz, al que el colegiado le perdonó la segunda amarilla tras propinarle una patada por detrás a Luismi.
Mel hizo los primeros cambios del partido en el 57. Marlos Moreno y Ángel dejaron sus puestos para que entrasen Waldo y Enric. Hombre por hombre, en ambos casos.
La segunda ventana la gastó el míster madrileño por motivos obligatorios. Medrano no pudo continuar en el terreno de juego y pidió la sustitución. Entró David Rodríguez, que se colocó en la zurda y se mantuvo en el lateral derecho Mellot.
También hizo cambios el Cartagena, que metió en el campo a Ortuño y Cedric. Con ambos, el equipo albinegro dio un paso adelante y se acercó más a la meta de Carrasco.
Justamente fue de Cedric el disparo que tuvo que desviar a córner Carrasco en el minuto 74.
Rondó el gol el Cartagena con un disparo de Pocho Román tras una mala salida de portería de Carrasco. Salvó sobre la línea de gol Mellot, aunque la jugada estaba invalidada. Antes de todo eso, Dani Fernández salió del campo para que entrase al partido otro producto de la factoría de Geneto: Aarón Martín.
También la tuvo clara el Tenerife por mediación de Luismi. Balón de Enric para que el ’11’ blanquiazul condujese en solitario rodeado de tres rivales. Finalizó jugada con la zurda, marchándose el balón pegado al palo derecho de la meta de campos. Corría el minuto 80.
Los últimos minutos fuerond e total dominio blanquiazul, que incluso se mereció aumentar el marcador. La tuvo Aarón tras una cesión de Diarra. Se lamentaba Waldo de que no le hubiese llegado la pelota, ya que estaba en mejor posición para rematar.
No fue en esa jugada cuando llegó el 2-0. Fue acto seguido. Le empezó a dar forma al segundo tanto de la noche una recuperación de Gayá. Diarra llegó a línea de fondo con la pelota controlada y mostrando un temple asombroso para acabar asistiendo Enric, quien culminó la acción marcando su primer gol de la temporada.
Fue la culminación de un partido que convirtiéndose en la primera alegría de la temporada para un Tenerife que ya empieza a demostrar que es capaz de revertir la situación.