Tras el ridículo copero, que por suerte no acabó en eliminación, el CD Tenerife regresa a la competición liguera con la obligación de no fallar en casa. Los blanquiazules se miden a un Mirandés que llega al Heliodoro Rodríguez López en un buen momento, con tres victorias en sus cuatro últimos partidos.
A las numerosas bajas se une ahora el cansancio que soportan los blanquiazules, quienes jugaron la prórroga frente al Alfaro de 2ª RFEF.
Causa baja para el duelo de hoy el delantero Ángel, lesionado el pasado jueves, mientras que es seria duda Marlos Moreno, también lesionado en la eliminatoria copera, donde solo jugó seis minutos por un golpe en la espalda.
Tampoco está disponible Aitor Sanz, quien pasará revisión médica y deberá “tomar una decisión porque no acaba de arrancar y se demora su vuelta”, anunció ayer Mel.
La buena noticia para el míster es que recupera a los centrocampistas Teto Martín y Maikel Mesa, ya que ambos han superado sus respectivas lesiones.
Ante la falta de efectivos en ataque, el entrenador ha citado a Ethyan González, delantero centro del Tenerife B, además de otros jugadores del filial como Adri Pérez, Matías Pezzolesi y Alassan, presentes también en el pasado choque copero.
Por su parte el cuadro burgalés también presentará con bajas importantes: Tachi, Postigo y Álex Calvo seguirán ausentes por lesión. Además el técnico Alessio Lisci no podrá sentarse en el banquillo por sanción, por lo que lo hará su segundo entrenador, Darío Navarro.





