Lo que vivió Santa Cruz anoche con el Tenerife Peñón Fest fue de otro mundo. Más de 8.000 personas experimentaron algo inolvidable, con el indie, el pop y el rock como protagonistas. Desde primera hora de la tarde, en la zona de aparcamientos del Palmetum, las buenas vibraciones indicaban que iba a ser un día de saltar, cantar, gritar, reír y disfrutar. Pues el cartel de este año era el siguiente: Dani Fernández, Carolina Durante, Zahara, Siloé, Nil Moliner, Bebe y Sexy Zebras.

El ambiente ya prometía mucho cuando Sexy Zebras pisaron el escenario para abrir el espectáculo, rondando las 15.45 horas. Actitud rockera, ganas de pasarlo bien y un público que tardó segundos en dejarse llevar. La energía se contagió de inmediato a partir de temazos que, cuando suenan, hay que cantarlos sí o sí, como Marisol, Nena o Tonterías.

CONEXIÓN CON LA MÚSICA
Después llegó una de las voces más especiales de la música española, Bebe, que apareció para conectar con aquellos que vivieron la primera década del siglo XXI de la mano de temas como Malo, Ella o Siete horas. Con una trayectoria que ha marcado una época, supo mezclar nostalgia y fiesta, invitando a cantar himnos que pertenecen a varias generaciones.

Mientras el ritmo no paraba, el público no solo pudo disfrutar de la música, también tuvo la oportunidad de pasarlo en grande con la zona de juegos. Desde los más pequeños hasta los mayores se divirtieron en un área de recreativos, donde el fotomatón generó colas.
Luego fue el turno de Carolina Durante, que elevó la intensidad con su estilo descarado. La banda animó a los presentes a darlo todo, como si esas canciones a gritos también formarán parte del espectáculo, especialmente durante la interpretación de Cayetano. Los pogos, los gritos, las risas, el buen ambiente de quienes vienen a un festival a pasarlo bien al ritmo de Joderse la vida y Misil.

Y si hablamos de voces muy características, hay que mencionar a Zahara, quien continuó la fiesta en Santa Cruz de Tenerife. Con su puesta en escena tan característica, hizo que el recinto se volviera en un lugar soñado para los mayores fans de la artista andaluza. Las emociones estaban a flor de piel con berlin U5, Con las ganas o Ramona.
GASTRONOMÍA Y ‘ECOMARKET’
Empezaba a caer la noche y fue el momento perfecto para recargar las pilas en el espacio gastronómico del Tenerife Peñón Fest. La mezcla culinaria de los food trucks, con propuestas internacionales, ofrecieron platos para todos los gustos.
Además, entre actuaciones, las personas asistentes también se acercaron a curiosear en el ecomarket, donde la artesanía y el talento de las Islas cobró protagonismo en forma de zarcillos de colorines, ilustraciones e incluso tatuajes para llevarse un recuerdo imborrable del festival.
La noche continuó con otro de los grandes momentos. Nil Moliner saltó al escenario llevándose una ovación del público. Sus ritmos contagiosos y su energía transparente convirtieron a los fans en una sola voz. Tu cuerpo en braille o Mi religión, entre otros éxitos, cantados por miles de personas junto al artista, hicieron que se viviese un momento simplemente impresionante.

EMOCIONES
Y llegó él. Dani Fernández. Uno de los más esperados de la noche, sin duda. Subió al escenario para reventarlo por completo. Desde el primer acorde demostró por qué es uno de los artistas más queridos y premiados del panorama nacional. Baladas que llegan a lo más profundo, temas que te dejan sin aliento, y un cierre por todo lo alto de su actuación con el público entregadísimo durante Dile a los demás o Bailemos.
Al cierre de esta edición estaba previsto que subiera al escenario Siloé para poner el broche al festival, con una mezcla perfecta de fuerza y sensibilidad.





