En el vasto y misterioso mundo de la arqueología submarina, los arqueólogos tienen pocas historias son tan fascinantes como la de Pavlopetri, una ciudad que yacía oculta bajo las aguas del Peloponeso, al sur de Grecia. Aunque la mítica Atlántida ha capturado la imaginación de muchos, Pavlopetri se presenta como una urbe sumergida real, mucho más antigua, y cuya historia continúa revelándose a través de las exploraciones científicas modernas.
Descubierta por primera vez en 1904 por el geólogo Folkion Negris, Pavlopetri permaneció en gran medida olvidada hasta que, en 1967, Nicholas Flemming, del Instituto de Oceanografía de la Universidad de Southampton, volvió a poner los ojos del mundo sobre ella. Este redescubrimiento marcó el inicio de una serie de investigaciones que han revelado sorprendentes detalles sobre esta enigmática ciudad de la Edad del Bronce según los arqueólogos.
Al año siguiente, en 1968, Flemming junto a un equipo de arqueólogos de la Universidad de Cambridge, emprendieron una exhaustiva inspección de seis semanas en el lugar. Sumergida a unos tres o cuatro metros bajo el nivel del mar, la ciudad comenzó a revelar su estructura: al menos 15 edificios separados, patios, calles y tumbas, todos ellos perfectamente cartografiados por los investigadores. Además, del fondo marino emergieron varios artefactos que incluían cerámicas, cuchillas y una pequeña figura de bronce, todos datados entre el 2800 y 1180 a.C. Los edificios, sin embargo, se remontan a un periodo entre 1650 y 1180 a.C., situando a Pavlopetri en el corazón de la historia de la civilización micénica.
El verdadero reconocimiento y atención internacional hacia Pavlopetri no llegó hasta cuarenta años después, cuando en 2009, un equipo internacional de expertos decidió emprender un ambicioso proyecto de cinco años para explorar y excavar la ciudad en mayor profundidad. Este grupo, compuesto por el Eforato de Antigüedades Subacuáticas del Ministerio de Cultura griego, el Centro Helénico de Investigación Marítima y la Universidad de Nottingham, desveló aproximadamente 9.000 metros cuadrados adicionales de edificaciones, entre las cuales se destacaba un gran salón rectangular y diversas estructuras alineadas a una calle previamente oculta.
La cerámica desenterrada durante estas excavaciones por los arqueólogos confirmó la ocupación de Pavlopetri durante el periodo micénico, la última fase de la Edad del Bronce en Grecia. Además, la evidencia sugiere que la ciudad estuvo habitada desde alrededor del 3000 a.C. hasta el 1100 a.C., albergando en su apogeo a una población estimada entre 500 y 2000 personas. Estas cifras ofrecen un vistazo a la vida cotidiana y la organización social de una de las civilizaciones más antiguas de Europa según los arqueólogos.
Los arqueólogos y su búsqueda de la Atlántida en la historia
El destino final de Pavlopetri sigue siendo un misterio. Aunque algunos expertos sugieren que la ciudad podría haber sucumbido a un terremoto alrededor del año 1000 a.C. o incluso en el 375 d.C., estas hipótesis no han sido confirmadas con certeza. Lo que sí es indiscutible es que la historia de Pavlopetri se entrelaza con las narrativas de civilizaciones perdidas, algunas tan legendarias como la Atlántida de Platón. De hecho, la antigüedad de Pavlopetri, que precede a los relatos de Platón, ha llevado a algunos entusiastas a especular que esta ciudad podría haber sido la inspiración real detrás del mito de la Atlántida, un lugar brillante y avanzado que se hundió en el mar.
El trabajo en Pavlopetri no solo ha ampliado nuestra comprensión de las civilizaciones antiguas, sino que también ha desafiado las técnicas de arqueología submarina. El uso de tecnologías modernas, como el sonar de barrido lateral y la fotogrametría digital, ha permitido a los investigadores crear mapas detallados y modelos 3D de la ciudad sumergida, proporcionando una visión sin precedentes de su estructura y extensión.
La historia de Pavlopetri es un recordatorio de que bajo las aguas que cubren nuestro planeta según los arqueólogos, yacen ocultas innumerables historias esperando ser descubiertas. A medida que los arqueólogos continúan sus exploraciones, cada nuevo hallazgo en Pavlopetri no solo enriquece nuestra comprensión del pasado, sino que también alimenta la imaginación sobre los secretos aún no revelados de nuestra historia compartida.
En la actualidad, Pavlopetri sigue siendo un foco de estudio y fascinación, ofreciendo una ventana única a una era lejana y a una civilización que, a pesar de haber desaparecido bajo el mar, continúa hablándonos a través de los siglos.