Acudía de gallo tapado el Tenerife a Butarque. El rival era líder de la categoría por méritos propios, llevaba casi un año sin perder ante su afición y el estadio presentaba sus mejores galas para recibir al cuadro insular. Todas estas circunstancias se las saltó a la torera el Tenerife para llevarase un triunfo tan merecido como codiciado que dispara las ilusiones de los birrias.
Martí hizo lo que se esperaba y metió a Lara en el equipo titular. Le resolvió la papeleta. El rubio metió el gol de la jornada con un impresionante disparo de falta directa que colocan al Tenerife a cinco puntos de distancia de los puestos de play-off.
Ciertamente el partido giró en muchos momentos en torno al dorsal 7 blanquiazul, que disputó su primer partido como titular tras recalar en el conjunto canario a principios de febrero. Lara tuvo en sus botas la primera oportunidad de su equipo con un disparo que se marchó alto a los 14 minutos. Antes había probado fortuna el argentino Szymanowski, quien tuvo la primera ocasión de gol con un remate fuera tras un buen centro desde la derecha de Peña.
La primera mitad no tuvo demasiados acontecimientos, más allá de que el Tenerife controló la parcela defensiva con firmeza, El Leganés no se encontraba cómodo, por mucho que manejara la pelota y se aproximara al portal de Dani Hernández.
Moutinho y Nano casi adelantaron a los suyos con sendos disparos que llegaron mediada la primera parte. La respuesta de los locales no se hizo esperar y Szymanowski y Gabriel también intentaron marcar, metiendo el miedo en el cuerpo a los visitantes.
La segunda mitad fue un cúmulo de ocasiones maltrechas por parte del Tenerife. Para empezar, falló Nano a los 57 minuto. Remate del canterano que tocó en el palo derecho de la portería local y Mantovani, en la línea de gol, acertó a despejar el peligro. Increíble.
Menos mal que ahí estaba Lara para solucionar el problema. Suso es derribado, tras ser zancadilleado, y el colegiado pita falta pegada a la frontal del área. El canterano reclamaba penalti, mientras que Lara, muy seguro de sí mismo quería ejecutar el lanzamiento. No se lo pensó dos veces. Con la derecha clavó un soberbio disparo que se coló por la escuadra de la portería del portero del Leganés. Sin duda, es el gol de la jornada.
Quedaba mucho tiempo para sufrir, aunque si los blanquiazules lo pasaron mal, fue porque lo quisieron. Oportunidades para evitarlo tuvieron. Por ejemplo el penalti que falla Vitolo o en la acción que Omar se hace un jaleo con el balón en los pies y no puede alojar el balón en la desguarnecida portería pepinera.
Pero ellos también pudieron empatar. En los minutos finales, un remate de Borja Lázaro dentro del área pequeña que se marchó alto y ya en el tiempo añadido con un disparo de Rubén Peña que sacó de manera magistral en el mano a mano Dani Hernández.
