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Puerto de la Cruz será la primera ciudad de Canarias en tener un parque infantil inclusivo

Ubicado en la zona de La Paz, el recinto contará con espacios que integran juegos para niños con diversidad funcional; las obras comienzan en enero y durarán ocho meses
EUROPA PRESS

Puerto de la Cruz será el primer municipio en Canarias en contar con un parque infantil inclusivo, un proyecto ambicioso dado sus dimensiones y características, y anhelado por las asociaciones que atienden a niños con diversidad funcional, como AsmiPuerto, Plataforma por un Puerto de la Cruz Accesible y Diverso, y Visión Azul, que desde hace tiempo demandaban un espacio adecuado y sin barreras para estos pequeños.

El recinto estará ubicado en La Paz, en una superficie de 6.200 metros cuadrados, que comprende la actual plaza del Laurel y la zona de aparcamiento que le da acceso por la calle Garoé, donde también se planificarán plazas de estacionamiento para personas con movilidad reducida.

Las obras comenzarán el próximo mes y si se cumplen los ocho meses de plazo previstos, culminarán a finales de 2018. Así lo aseguró ayer el presidente del Cabildo de Tenerife y del Consorcio Urbanístico del Puerto de la Cruz, Carlos Alonso, durante la presentación del proyecto, realizado por Jiménez y Bazán Arquitectos, empresa que ya tiene experiencia en intervenciones de diseño urbano y paisaje. No obstante, ha contado con el apoyo de Sinpromi para su planificación y el asesoramiento de representantes de los citados colectivos, que participaron en sendas reuniones organizadas por el Consorcio.

Estos últimos también estuvieron presentes en el acto, que se organizó en la misma plaza, al que también acudieron el alcalde, Lope Afonso; el viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias, Cristóbal de la Rosa; la consejera de Acción Social y vicepresidenta de Sinpromi, Coromoto Yanes; concejales de las diferentes áreas municipales, miembros de la asociación de vecinos de La Paz, el Centro de Iniciativas Turísticas (CIT) y la patronal Ashotel.

La instalación tendrá una inversión de 757.000 euros y se incluye dentro de las actuaciones de adecuación de espacios libres del Plan de Modernización y Mejora (PMM) de la ciudad turística.

Un parque inclusivo está pensado para el disfrute de todos los niños independientemente de sus capacidades físicas, sensoriales o cognitivas. De esta forma, se busca la integración a través de los juegos donde todos puedan ser partícipes y su relación con las personas mayores.

Vegetación

La arquitecta Leticia Jiménez explicó las características del nuevo recinto, que conservará su actual vegetación (kentia, washingtonia, ficus y falso pimentero). En lo que respecta a las zonas de juegos, éstas se dividirán en función de la edad: de 0 a 3 años y de 3 en adelante.

Una de las principales características del parque El Laurel será la existencia de espacios en los que se destacan o se potencian las diferentes áreas sensoriales. Así, habrá algunos distinguidos por colores, vegetación aromática, mientras que en otros prevalecerá el sentido del tacto a través de la textura de la superficie del suelo. Son características pensadas para todo tipo de diversidades funcionales que hacen de este parque una instalación única e inclusiva.

También dispondrá de una zona de recreo con minicarrusel, columpios nidos, cabañas con red, tobogán, trenes de madera, tirolina, juegos de eco, de conferencia, además de estancia de sillas, merendero y aparcamientos adaptados. Los juegos están diseñados para el aprovechamiento e integración con el espacio, al objeto de que puedan jugar no solo los niños sino también sus familiares y acompañantes.

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