David Batista suma desde ayer a la condena de 37 años de cárcel por el asesinato de Laura González otros tres años y medio más de prisión por los delitos de acoso y amenazas contra la joven palmera a la que prendió fuego en el establecimiento donde trabajaba en pleno centro de la capital palmera la mañana del diez de julio de 2015.
Batista reconoció los hechos durante la celebración de esta nueva causa, que se celebró en el Juzgado de lo Penal de Santa Cruz de La Palma, como una causa separada del juicio con jurado popular en el que se determinó su culpabilidad por el asesinato y que tuvo lugar en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife a principios del pasado año 2017.
La abogada de la acusación particular, Milagros Fuentes, indicó que por cada uno de los delitos (acoso y amenazas) recibió la condena más estricta que establece la legislación para estos casos, un año y nueve meses. En total, David Batista ha sido condenado a 42 meses de cárcel. La letrada palmera subrayó que en este caso se han sumado también el agravante de género y de parentesco, dos aspectos novedosos en la legislación.
Con este procedimiento abreviado que se ha seguido en la sala de los Penal de la capital palmera, donde David Batista, que cumple condena fuera de la Isla, compareció a través de vídeoconferencia, se pone fin a este proceso judicial por un asesinato que conmocionó a la isla de La Palma en plena celebración de las Fiestas Lustrales de la Bajada de la Virgen de 2015.
Batista está cumpliendo una condena de 25 años de cárcel por un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento con las circunstancias agravantes de parentesco y por razón de género. Además, de otra condena de 12 años por un delito de incendio con riesgo para la vida o integridad de las personas que se encontraban en el establecimiento comercial en el que trabajaba su expareja.
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