El Observatorio del Roque de Los Muchachos albergó la noche del martes a dos huéspedes especiales: el escritor Mario Vargas Llosa y su pareja, Isabel Preysler. Ambos valoraron, antes de regresar ayer a Madrid, la oportunidad de contemplar el firmamento desde uno de los telescopios más potentes del mundo, el Gran Telescopio de Canarias, y la belleza de la isla de La Palma.
Vargas Llosa reconoció que pese a tratarse de una visita relámpago, “ha sido de enorme significación e importancia para mí y estoy seguro que para Isabel también”. Así lo manifestó el Premio Nobel durante una comparecencia de prensa que realizó con el director del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), Rafael Rebolo, quien mostró su agradecimiento “de corazón” por la visita a las instalaciones del Observatorio palmero.
Una isla a la que reconoció que viajaba por primera vez el escritor peruano y cuya estancia en el Observatorio sintetizó con la máxima de que “hay que acercar la literatura a las estrellas.” El viaje de Vargas Llosa e Isabel Preysler a La Palma concluyó ayer con un almuerzo en el Hotel Hacienda de Abajo, en el que participó Rebolo, el presidente del Cabildo, Anselmo Pestana, y los escritores Elsa López, Anelio Rodríguez y Armas Marcelo.
“Es la primera vez que vengo a La Palma y espero que no sea la última”, reconoció el escritor, quien todavía no descarta, aunque a priori es difícil porque tiene un compromiso para esas fechas, que pueda estar en el encuentro de escritores hispanoamericanos que se celebrará el próximo mes de septiembre en Los Llanos de Aridane.
“La isla es preciosa”, confesó Vargas Llosa, quien destacó su “geografía muy peculiar”, pero en especial la “experiencia única de pasar una noche en el Observatorio, no solo por lo que significa, a través de esos telescopios tan poderosos, visitar el Universo, acercarse a ese espacio infinito del que formamos parte, sino también todas las explicaciones que he recibido, las informaciones y la experiencia de vivir de cerca lo que es la vida de un astrónomo”.
El autor destaca que en esta experiencia se funde tanto el lado estético de la contemplación del cielo estrellado, con la metafísica, que ante la amplitud de Universo sitúan al ser humano ante las grandes preguntas que lo han acompañado a lo largo de los tiempos.
En ese sentido, mostró su convencimiento de que “la Astronomía es una disciplina en la que se rompen las fronteras entre la física y la metafisica, y así además de la experiencia científica, hay también una experiencia espiritual”. “De alguna manera -prosiguió- nos acerca un poco a esa gran indagación de quienes somos, de dónde venimos y adónde vamos, o si hay algo detrás de todo esto o simplemente todo nació del azar”.
Una experiencia, por tanto, “muy intensa y duradera” para el escritor, pero que no sabe si la convertirá en un relato. En cualquier caso, destacó que “es una fuente riquísima de inspiración una experiencia como esta, pasear por las estrellas”.
EUROPA
Mario Vargas Llosa no solo es un conocido escritor de ficción literaria. Su pluma también analiza la realidad sociopolítica, desde una óptica liberal que el intelectual no ha escondido. Fenómenos como EL de la inmigración en Europa y las distintas reacciones que está provocando fueron objeto de análisis por el escritor en su visita a Canarias, un Archipiélago que vive de cerca este drama.
“La emigración de miles de personas, fundamentalmente del continente africano, es un gran homenaje a Europa, ya que desde la perspectiva de esos paises es una especie de paraíso, que representan la legalidad, la libertad, el trabajo, las oportunidades que no tiene en su lugar de origen”, comentó Vargas Llosa.
Además defendió que “la gran tradición democrática y liberal es la de abrir los brazos a los inmigrantes que, en general, traen muchos más beneficios que perjuicios, en contra de lo que dicen los racistas”. Si bien, a pesar de que este es el horizonte moral, también reclama una postura pragmática de los países para atender esta problemática porque “no pueden aceptar de una manera absolutamente indiscriminada a todos los inmigrantes que quisieran venir”.
En este sentido, reclamó la necesidad de que haya una política europea, que “suscriban todos los países que firman ese gran proyecto que es la unidad de Europa”, que combine esa tradición de apertura con políticas pragmáticas.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas