Así destruyen las llamadas termitas subterráneas del este toda la madera con la que se topan en su avance por Tenerife, donde ya han afectado a más de cien viviendas en el término municipal de Tacoronte y se han propagado al contiguo de La Laguna por la zona de Valle de Guerra, además de un caso también detectado en un centro comercial de Los Cristianos (Arona).
Como puede observarse en estos vídeos, facilitados por la empresa especializada Anticimex, la voracidad de estas termitas es tremenda y su capacidad destructiva es temible, por cuanto se infiltran en las construcciones por los conductos abiertos para el cableado o el agua, un elemento que les encanta.
La primera vez que fueron detectadas fehacientemente en Tenerife fue en junio del año pasado, pero la inacción de las autoridades ha facilitado la expansión de esta especie invasora que, a gran escala, nunca ha sido posible erradicarla en todo el mundo. Por citar un ejemplo de la gravedad del tema, basta con recordar que EE. UU., país del que es originario este insecto, destina anualmente cerca de 2.000 millones de dólares solo para mantenerlas a raya.
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