Los ancianos palmeros que “viajan” para dar la vuelta al mundo

Hombres y mujeres llegados a la ancianidad con lagunas en la memoria, con patologías neurológicas y otras motóricas, ancianos con edades “muy respetables” que pasan sus días en el único centro geriátrico de la La Palma, el Hospital de Los Dolores, son estos días los protagonistas de un proyecto piloto en Canarias. Están dando “La vuelta al mundo en 80 días” a través de las páginas de esta obra de Julio Verne, a la que han llegado de la mano de un club de lectura fácil adaptado a sus capacidades para vivir las peripecias del inglés Phileas Fogg, que, acompañado de su inseparable Picaporte, les hace sorprenderse, sonreír y emocionarse, pero sobre todo unir pasado y presente.

El Cabildo palmero, a través de la Consejería de Sanidad, ha apostado por llevar a esta instalación geriátrica el proyecto que desarrolla la organización Plena Inclusión. Su coordinadora en La Palma, Tamara Viñoli, confiesa que el deseo de la entidad es alargar este servicio, de forma que no se trate de una actividad puntual . “Este es un servicio pionero e innovador en la Comunidad Autónoma de Canarias que trata de adaptar textos para que puedan ser comprensibles para cualquier persona con discapacidad o con algún tipo de limitación”. Detalla que “la premisa fundamental es que se cumpla el derecho de la Accesibilidad Universal, de forma que estos y otras personas mayores puedan acceder a la formación, a la información y a la cultural. Esta -asegura- es una manera de hacerlo”. La imagen preconcebida y en muchos casos acertada, de como los ancianos atraviesan las horas sin iniciativa o con escasa actividad cognitiva, pierde músculo ante la ejecución del proyecto, en el son ellos mismos los que leen en voz alta, contestan a preguntas, relacionan la acción de la novela de aventuras con su pasado de forma sorprendente, con las experiencias que han vivido y con una parte de ellos mismos que lejos de identificarse con la silla de rueda con la que logran movilidad, se ven como personas armadas con un poderosa imaginación, con sus recuerdos y con la sabiduría que, en ocasiones, dan los años.

“Vamos a seguir con el proyecto hasta el mes de junio”, explica la consejera responsable del área de Sanidad, Susana Machín, que explica que la decisión, que incluso podría tener un mayor horizonte de supervivencia, responde a que “cada vez más los mayores del centro que se quieren integrar y porque algunos de sus familiares, quieren sumarse a estas tertulias y compartirlo de forma directa con sus mayores”.

Participan en el proyecto no solo residentes, sino algunos otros usuarios que llegan al centro para lo que se denomina “recuperación funcional”. Luz Rodríguez Díaz, técnico auxiliar de Laborterapia, que les acompaña a diario en el Hospital de Los Dolores, se muestra orgullosa cuando les escucha leer, cuando alguno de sus ancianos hace una reflexión en voz alta, toma la iniciativa o sencillamente muestra interés por el desarrollo de la lectura. El proyecto sociosanitario al que aspira La Palma, liderado por Bienestar Social con un 25% del Presupuesto de la institución este año, podría extender el desarrollo de este tipo de programas que van allá del mero cuidado asistencial, a un mayor número de los centros de día y residencias de mayores. Mientras tanto, los ancianos del Hospital de Dolores que participan en el proyecto disfrutan de la aventura de vivir, estos días a través de la lectura de “La vuelta al Mundo en 80 días”.