La capital de la Isla estará sujeta a los pactos de gobierno y a las negociaciones de cinco formaciones políticas con representación. El candidato socialista debutante en esta cita con las urnas, Elías Castro, lográ la mayoría de los votos, con seis concejales, el mismo número que su antecesor en el cargo y ahora senador, Sergio Matos, logró en 2015. El nacionalista Toni Acosta logra dar a Coalición Canaria mayor peso en el consistorio, con cuatro concejales, uno más que en los anteriores comicios locales, mientras que el conservador Juanjo Cabrera, aumenta tímidamente el porcentaje de votos, insuficiente para aumentar la representación de los populares, que mantienen sus cinco concejales. Los candidatos de Ciudadanos y Nueva Canarias, Juan Arturo San Gil y Maeve Sanjuán, logran mantener su representación municipal, aunque es el edil de la formación naranja el que pierde más de 150 votos con respecto a 2015 mientras que la nacionalista de izquierdas logra un pauperrimo repunte.
El alcalde de San Andrés y Sauces y candidato del Partido Socialista en esta nueva convocatoria electoral, Francisco Paz, revalida la mayoría absoluta que ya logró en los comicios de 2015, con un total de 8 concejales. La continuidad en el escaso respaldo electoral a la lista de Coalición Canaria se mantiene, con solo dos concejales y 585 votos, lo que en términos porcentuales se traduce en el 22,60%. Al otro lado de la Isla, en Tijarafe, feudo histórico de los nacionalistas obligados a gobernar en pacto con el PSOE durante el presente mandato por una mayoría insuficiente, el nacionalista Marcos Lorenzo, recupera la mayoría absoluta alcaldía con 6 concejales. Izquierda Unida y Podemos, que de haber ido juntos hubieran quitado el concejal a Ciudadanos, no logran representación en el consistorio de la capital palmera, donde el nivel de abstención se situó en un 37,59%.
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