santa cruz

Un siglo de procesión marinera

La imagen de la Virgen del Carmen recorrió ayer las calles y el puerto capitalino igual que en 1919, cuando embarcó por primera vez
La imagen procesionó por las calles de Santa Cruz hasta llegar al puerto capitalino. S. M.
La imagen procesionó por las calles de Santa Cruz hasta llegar al puerto capitalino. S. M.
La imagen procesionó por las calles de Santa Cruz hasta llegar al puerto capitalino. S. M.

Con casi 300 años de historia, la festividad de la Virgen del Carmen en Santa Cruz se ha hecho un hueco importante en un municipio que no olvida su origen como pueblo de pescadores. Con la misma fe con la que los feligreses siguieron a la imagen el 16 de julio de 1720, durante su primera procesión por las calles capitalinas, o cuando se embarcó por vez primera en 1919, tal y como recuerda en sus escritos el cronista de la ciudad, José Manuel Ledesma, ayer cientos de personas se dieron cita para rendir honores a la patrona de los marineros cuando se cumplían 100 años de ese primer embarque.

A las seis de la tarde dio comienzo la eucaristía en la parroquia matriz de Nuestra Señora de la Concepción, para a continuación iniciar el recorrido por las calles aledañas que llevaron a la Virgen del Carmen hasta el puerto capitalino. Allí, por primera vez, fue recibida por la Policía Portuaria, que escoltó la imagen hasta el Muelle Sur, donde la esperaba el remolcador que la llevaría por las aguas de la Dársena de Anaga.

Ledesma cuenta, en el artículo publicado en la web del cronista oficial de Santa Cruz, que en aquella primera procesión la imagen estuvo acompañada de la Cruz Fundacional y de todas las cofradías de la parroquia. Ese día, la Virgen del Carmen iba ataviada con su manto de seda y de su mano colgaba el gran escapulario de plata. Igual que entonces, ayer en la cabecera de la procesión iban las autoridades civiles y militares, vestidas de gala, con la diferencia de que, este año, por primera vez en la historia de la procesión y de la ciudad, esa comitiva la encabezó una mujer, la alcadesa Patricia Hernández.

La comitiva de 1720 recorrió las calles de la Noria, Santo Domingo, las Tiendas y, al llegar a la plaza de la Pila, tomó la rampa de la caleta de Blas Díaz para dirigirse a la Calle Grande, y llegar de nuevo a la plaza de la Iglesia. No fue hasta 1919 cuando la procesión también se hizo marinera. En ese año, un armisticio ponía fin a la Primera Guerra Mundial. Así, el 16 de julio, el entonces párroco de Nuestra Señora de la Concepción, para agradecerle a la Virgen del Carmen la llegada de la paz, decidió llevarla hasta el muelle de Santa Cruz, subirla en una gabarra arrastrada por un remolcador y realizar con ella un paseo marítimo por la bahía. Este acontecimiento fue seguido por infinidad de veleros y barquitas, así como por un gran gentío que llenó los aledaños de las instalaciones portuarias. Ayer, 100 años después, ese mismo recorrido llevó a la Virgen del Carmen hasta la pasarela instalada frente a la sede del Cabildo de Tenerife, de allí a la primera alineación del Muelle Sur y después su embarque para dar comienzo a la procesión marítima. En el trayecto se realizó el tradicional homenaje floral a las víctimas del mar. Aunque hoy en día no es necesario, en la celebración de 1924, con el fin de que acudieran más embarcaciones, se premió a la mejor engalanada con 100 pesetas, y en 1931 el Ayuntamiento capitalino la consideró fiesta oficial, junto con la de la Santa Cruz (3 de mayo) y los Carnavales. Desde entonces, Santa Cruz de Tenerife celebra con gran júbilo y devoción esta tradición ya centenaria y así, cada 16 de julio, la Virgen, adornada profusamente, se entrona en un remolcador del servicio portuario y recorre el interior de la Dársena de Anaga, desde el Muelle de Enlace hasta la punta del Muelle Sur, donde se tira al mar una corona de flores en recuerdo de los marinos fallecidos en el mar.

Ayer la coincidencia con el multitudinario embarque del Puerto de la Cruz, que se realiza el segundo martes de julio, hizo más valioso si cabe el apoyo de las embarcaciones de los puertos deportivos y pesqueros más cercanos que participaron en la procesión marítima.

Actos

Con la procesión de la Virgen del Carmen y su posterior embarcación, Santa Cruz se imbuye ya de lleno en un mes de julio caracterizado por la festividad del Carmen, la conmemoración de la Gesta del 25 de julio de 1797 y la celebración del Día de Santiago Apóstol, patrón de la capital. Los actos de celebración de la festividad del Carmen empezaron el 6 de julio con una limpieza del barranco de Tahodio y la playa de Valleseco, y mañana tendrá lugar la Gala Ciudad y Puertos juntos, como símbolo de unión y compromiso de administraciones y empresas con los vecinos de Santa Cruz. Los actos concluyen este domingo con el embarque de Valleseco.

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