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El VAR rompe con la racha de seis partidos sin perder

El colegiado señala penalti en una mano involuntaria de Luis Pérez en el minuto 83. Rodri transformó en el minuto 88 el gol de la derrota blanquiazul
El VAR rompe con la racha de seis partidos sin perder. | LaLiga

La única variación fue la esperada. Entró Javi Muñoz en lugar de uno Joselu que no pudo jugar por la cláusula del miedo que incluyó el Oviedo en el contrato de cesión del delantero al CD Tenerife. El resto de la formación fue la misma que el pasado fin de semana derrotó en el Heliodoro al Elche. El canterano Jorge fue el descarte que decidió hacer Rubén Baraja de la preconvocatoria.

Durante la primera mitad, los acercamientos más peligroso, que no las ocasiones, fueron del equipo visitante. De hecho, tras disputarse la primera parte del partido, los de Baraja eran dominadores del encuentro y el cuadro ovetense estaba prácticamente encerrado en su campo. Antes de eso, a los blanquiazules se les anuló una clara ocasión de gol por fuera de juego de Dani Gómez que acabó rematando de cabeza Moore a las manos del portero. El cuadro local apenas fue capaz de crear peligro por la banda izquierda, aunque no era capaz de dar el último pase.

La nota más negativa de este primer acto fue las tres tarjetas amarillas que vieron el equipo chicharerro (Álex Muñoz minuto 25, Moore en el minuto 29 y Sipcic en el 33). Precisamente una falta de Sipsic, que fue amonestado por ella, originó la ocasión más peligrosa del Oviedo. Tejero lanzó con potencia por encima de la portería de Ortolá.

La parte positiva fue la gran actuación que vuelve a firmar un Dani Gómez que está de dulce. Fue el jugador más peligroso del Tenerife y el que creó numerosos dolores de cabeza a la defensa carbayona.

La segunda parte llegó con otro susto para la parroquia local. Balón largo para Dani Gómez que finaliza la acción con un potente disparo que repele la base del poste derecho del meta ovetense. No obstante, la jugada estaba invalidada desde su inicio por encontrarse el delantero madrileño en fuera de juego.

También fue amonestado Aitor Sanz en el minuto 58, por lo que ya eran cuatro los blanquiazules los que estaban advertidos. La falta del mediocentro propició un cabezazo de Luismi que se fue, por muy poco, a la derecha de Ortolá.

En el minuto 66 Rubén Baraja decidió hacer la primera variante del encuentro. Quitó del campo a un desaparecido Nahuel Leiva y metió a Álex Bermejo. Ziganda también había movido su banquillo (entraron Ibra y Borja Sánchez por Ortuño y Saúl Berjón, respectivamente). Los cambios oviedistas funcionaron a la perfección y el cuadro carbayón empezaron a llegar con peligro a la meta tinerfeña. Lasure entró al terreno de juego en el minuto 78 por Javi Muñoz, por lo que Bermejo se fue a la mediapunta y Lasure a la banda zurda. La última sustitución blanquiazul fue la del delantero centro, hombre por hombre, Miérez por Dani Gómez (min 81).

En el 83 se produjo la jugada polémica del partido y decisiva. El VAR mandó al colegiado a revisar una mano involutaria de Luis Pérez. El lateral desvió el balón con la mano derecha y el trencilla, una vez vista la imagen en el monitor, no dudó en señalar el punto fatídico. A Rodri Ríos no le tembló el pie a la hora de fusilar a Ortolá. El gol se produjo en el minuto 88.

Prolongó el colegiado siete minutos, en los que prácticamente no se jugó a nada y en los que el Tenerife no creó ni una sola ocasión de gol. Así se quebró la racha de seis partidos sin perder que sumaba el CD Tenerife consecutivamente.

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