
El confinamiento decretado para prevenir la expansión de la Covid-19 marcó una pausa en muchas actividades económicas, aunque también delictivas. Hace algunos meses, antes de la irrupción del coronavirus, el Valle de Aridane se vio azotado por una serie de actos vandálicos que incluían incendios de vehículos y contenedores o destrozos en el mobiliario público, entre otras acciones de la misma naturaleza.
Ahora han sido las instalaciones del Estado Municipal Aceró, en Los Llanos de Aridane, las que han sufrido el ataque de personas sin identificar. Las mismas, accedieron el pasado fin de semana al almacén de material, rompiendo todo a su paso y lanzando objetos a la piscina pública, ubicada en las proximidades del complejo.
¿El objetivo? Según denuncia la Unión Deportiva a través de redes sociales es “romper lo que tanto ha costado tener”. “No entran a robar, saben que no hay nada de dinero ni de valor que merezca la pena por el riesgo. Entran para divertirse causando daño”, señalan.
Precisamente otro de los enclaves atacados a principios de año fueron las canchas anexas al estadio. En aquella ocasión, uno de los banquillos quedó completamente destrozado, con pedazos de plástico en el suelo y un bidón empotrado en el armazón. Además, la valla protectora del recinto fue arrancada y doblada. Y en la misma noche fue objeto de agresiones el parque infantil de Argual.
INCENDIOS
En la madrugada de ayer, efectivos del Parque de Bomberos de La Laguna (Los Llanos) tuvieron que intervenir en dos incendios de vehículos en el municipio aridanense y en la zona del Puerto de Tazacorte. En el primero, que tuvo lugar en la avenida Tanausú, participó la Policía Local y la Guardia Civil, dada la imposibilidad de determinar las causas por las que el coche comenzó a arder.
En la segunda actuación, en la localidad bagañeta, el turismo había recibido golpes en el cristal delantero y se podía apreciar el uso de algún acelerante para avivar las llamas. La Benemérita se encarga de las investigaciones.