Varios ayuntamientos del Sur advierten de la “situación límite” de la mayoría de centros educativos de la comarca para hacer frente a la demanda de alumnos el próximo curso y a las restricciones sanitarias para evitar los contagios por coronavirus.
Alcaldes, concejales, directores de colegios e institutos y sindicatos coinciden en que el ritmo de construcción de los centros educativos ha ido “muy por detrás” del vertiginoso crecimiento de población registrado en esta zona de la Isla desde los años 90. Hoy, casi tres decenios después, se siguen pagando las consecuencias con ratios por encima de los 30 alumnos por aula en la Enseñanza Secundaria Obligatoria y más de 25 en el caso de Infantil y Primaria.
El problema se agrava con el protocolo sanitario que se implantará a partir de septiembre para minimizar los riesgos de contagio de Covid-19 y que se conocerá esta semana, una vez aprobado por el Comité de Sanidad y Salud Pública. “¿De dónde vamos a sacar el espacio?”, se preguntaba ayer, en declaraciones a este periódico, un directivo de un instituto.
El alcalde de San Miguel de Abona, Arturo González, mostró ayer su preocupación por la “falta de previsión” de la Consejería. “La situación de la mayoría de los centros en el municipio está al límite, hay una falta de plazas evidente y seguimos esperando por los protocolos sanitarios para empezar el curso en septiembre”, lamentó el regidor, que advirtió que la situación está “ras con ras” en Infantil y Primaria y “saturada” en Secundaria. Puso el ejemplo del IES San Miguel, en Las Zocas, en el que cursaron estudios este año 770 alumnos, lo que obligó a repartir a otros 140 por dos centros más del municipio.
González apuntó también otro factor que complicará aún más la situación de la enseñanza pública el próximo curso a causa de la crisis económica. “Hay padres que ya nos han comunicado que no podrán pagar un colegio privado, como el Luther King de Aldea Blanca, y que tendrán que matricular a sus hijos en centros públicos, lo cual va a llenar todavía más las aulas. La realidad es que no hay sitio para tantos chicos”, manifestó.
En Arona tampoco se esconde la inquietud ante el inicio del próximo curso escolar. Su alcalde, José Julián Mena, señaló a DIARIO DE AVISOS, que “la preocupación es evidente porque el punto de partida de centros educativos es deficiente”, lo que achacó a la “falta de inversiones” en colegios e institutos acorde con el crecimiento poblacional experimentado por el sur de la Isla en los últimos años. “Hemos duplicado la población en Arona pero contamos con las mismas infraestructuras educativas de hace dos décadas”, indicó.
Mena recordó que “sin ir más lejos, planteamos al Gobierno de Canarias, al inicio del mandato, la necesidad de un nuevo centro en las medianías del municipio y que se finalizaran urgentemente las obras del IES Parque La Reina para poder trasladar al alumnado del instituto de Guaza” (conocido popularmente como el de los barracones).
Por su parte, la concejala de educación de Granadilla de Abona, Yanira González, subrayó que su municipio se sitúa entre los de mayor crecimiento de población de Canarias y esa realidad se ha trasladado a las aulas. “Los centros se han quedado pequeños y tanto en la costa como en las medianías hay masificación en las aulas”. El equipo de Gobierno de Granadilla de Abona ya ha trasladado su preocupación a la Consejería de Educación y “ha puesto a disposición del Gobierno de Canarias terrenos municipales en zonas de costa y medianías para la construcción de nuevas infraestructuras educativas”. En concreto, el Ayuntamiento ha cedido parcelas en San Isidro, El Médano y Los Abrigos.
La concejala expresó también su intranquilidad por la “incertidumbre” que rodean las restricciones que se implantarán en los centros frente a la Covid-19.
Varios directivos de institutos del Sur consultados por este periódico coincidieron en destacar las dificultades para materializar los protocolos de seguridad contra el coronavirus por la falta de espacios y los elevados ratios, muy por encima del resto de la Isla.
Carmen Luisa González y Violeta Aznar, que acaban de jubilarse después de toda una vida dedicada a la docencia y tras dirigir en los últimos años de sus carreras el IES Magallanes y el CEIP Abona, ambos en Granadilla, lamentaron el “abandono histórico” de la comarca por parte de las autoridades educativas, con “alguna excepción puntual”. “El Sur es otro mundo, la situación es muy grave y todos los años nos preguntamos lo mismo: ¿Dónde metemos a los alumnos el próximo curso?”.
Fuentes sindicales no ocultan su malestar por el “silencio” de la Consejería a la hora de convocar una reunión para perfilar el comienzo de curso. “Con el protocolo sanitario vamos a ciegas, no sabemos nada y los padres y profesores están desorientados”, indicó un portavoz, que recordó que una de sus reivindicaciones es la presencia de algún profesional sanitario que rote por varios centros de la misma zona para supervisar las condiciones higiénicas con el fin de evitar los contagios por Covid-19. “A situaciones extraordinarias, soluciones extraordinarias”, concluyó.
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