Tal y como se esperaba, el derbi canario fue un partido trabado y poco vistoso que se resolvió con dos goles que llegaron en la primera parte. Adelantó al equipo local Valentín Vada muy temprano, pero empató Sergio Ruiz casi al final del primer acto. De esta manera, el duelo de máxima rivalidad regional cumplió con las expectativas que habían creado dos equipos que prácticamente no se juegan nada ya en el campeonato y que están firmando una campaña mediocre. Eso sí, Tenerife sigue siendo tierra maldita para la UD, que acumula otro derbi sin ganar en suelo tinerfeño.
Luis Miguel Ramis no quiso arriesgar y apostó por formar un centro del campo sin fisuras y capaz de parra el enorme potencial ofensivo de Las Palmas. Nono, Vada y Zarfino se colocaron por delante de los jugadores de la medular, formada por la dupla Aitor Sanz y Ramón Folch. En las filas de la UD, Rober fue la novedad en el once de Pepe Mel. Además, entraron de inicio los hermanos Castellano, Javi y Dani, y se quedó fuera Mujica.
Los dos equipos comenzaron el choque con un ritmo elevado y siendo conscientes de lo que se estaban jugando ambas escuadras. Sorprendió la UD metiendo una presión elevada que al Tenerife le costó ajustar. Así nació la primera ocasión del partido, que fue para Rober con un disparo que se marchó alto (minuto 5).
Sin embargo fue el CD Tenerife el primero en golpear. En la primera llegada de los blanquiazules a la meta amarilla, Vada aprovechó un centro de Folch al segundo palo. Mide mal Lemos en el salto y Vada baja la pelota de primeras en el segundo palo con un control excelso y la cruza con el interior al palo contrario. Apenas se habían disputado nueve minutos del partido y ya los blanquiazules mandaban en el marcador.
A pesar de cobrar ventaja, el Tenerife mantuvo un nivel de concentración elevado. Vada, que perdió la posición ante Rober González, terminó agarrándole para frenar su conducción por banda. El colegiado de la contienda le amonestó.
Pudo marcar el Tenerife hasta en dos ocasiones en torno a la media hora de partido. En el minuto 27, Javi Castellano evitó el segundo. Un saque de esquina colgado desde la derecha lo prolongó Folch de tacón en el primer palo y Sipcic estaba ya en el segundo para empujarla, pero el mediocentro de Las Palmas se cruzó antes para despejarla a córner de nuevo. Cuatro minutos después, en el 32, una enorme volea de Zarfino a la media vuelta la paró el portero de Las Palmas cuando el balón se dirigía a la escuadra grancanaria.
Los jugadores de Pepe Mel se espabilaron en la recta final de la primera parte y avisaron con un latigazo de Araujo que respondió con suficiencia Dani Hernández. Pero tan solo fue un aviso de lo que iba a convertirse en el empate de Las Palmas. La colgó Pejiño desde la derecha y la zaga local despejó la pelota, pero Sergio Ruíz apareció en la frontal para pegarle con fuerza. La pelota rebota en Fran Sol y le vuelve a los pies del jugador amarillo, quien ya no perdona en la segunda ocasión que tiene, mandándola con potencia a la escuadra izquierda. Empate a uno cuando el Tenerife estaba cómodo en el choque.
El inicio de la segunda parte para los blanquiazules no fue nada buena. Los de Pepe Mel saltaron al terreno de juego con la iniciativa de tener más la pelota, mientras que el Tenerife esperaba pacientemente para poder robar y montar el contragolpe. No tardó Ramis en reaccionar y en meter en el campo a Shashoua y Manu Apeh, por Gio Zarfinno y el goleador Vada.
En el 58 tuvo que abandonar en camilla el terreno de juego Dani Castellano, quien se llevó un enorme pelotazo en el pecho y empezó a vomitar sangre. La camilla retiró del campo al lateral y entró en su puesto Jonathan. Aprovechó Ramis el parón para hacer otra variante (min 66), quitando del campo a un horroroso Nono y metiendo a un Suso que se convierte en el jugador que más derbis ha jugado en la historia de los clásicos canarios. En el 67 réplica instantánea de Pepe Mel con este nuevo cambio de fichas: se marchó con molestias Pejiño y entró el tinerfeño Óscar Clemente.
Se estiró el Tenerife tras los cambios y el duelo se convirtió en un correcalles que no parecía beneficiar a nadie. La tuvo Fran Sol en el 74, pero su golpeo con la cabeza se marchó rozando la escuadra. Posteriormente también buscó el 2-1 el inglés Shashoua con un disparo de falta que también se marchó alto.
Ramis agotó los cambios en el 80 con la entrada de Sergio González y Germán Valera. Se sentaron Fran Sol y Ramón Folch. Cinco minutos después Rafa Mujica malogró la ocasión más clara de la segunda parte. Su remate, claro, se fue por encima de la meta de Dani Hernández, quien ya temía que el balón entrase.
A pesar de los siete minutos que prolongó el colegiado, los dos rivales firmaron las tablas y apenas tuvo historia esa prolongación, salvo una jugada embarullada en el área de Las Palmas que resolvió con pelotazo alto Sipcic (94). En los instantes finales Carlos Ruiz fue amonestado, por lo que se pierde el próximo choque de los blanquiazules.