El hasta ahora vicepresidente del Cabildo de La Palma y consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Adrián Hernández Montoya, presentó su dimisión en el día de ayer por “motivos personales”, tal y como adelantó el secretario de Organización del PSOE de Canarias, Jorge González, a la Cadena SER. Una decisión que, no obstante, ha cogido “por sorpresa” a los socialistas, según indican fuentes de dicha formación a este periódico, quienes manifiestan su confianza en poder reconducir la situación y que el también exalcalde de Puntallana no deje el cargo.
La renuncia de Hernández Montoya, pese a producirse en un contexto de catástrofe natural sin precedentes, como es la erupción del volcán de Cumbre Vieja, siembra dudas sobre las consecuencias que, a efectos políticos, pueda tener. Ya a principios de año, cuando se conoció la vacunación contra la COVID-19 supuestamente irregular de la consejera insular de Sanidad, Educación y Artesanía, Susana Machín, Coalición Canaria presionó para que esta dejara el acta, pudiendo suponer la ruptura del frágil equilibrio que mantiene el pacto PP-PSOE en la primera Corporación de la Isla Bonita.
De acuerdo con las fuentes consultadas, en la bancada socialista hay distintas opiniones acerca de la idoneidad de continuar gobernando junto a Mariano H. Zapata (PP), con quien suscribieron un acuerdo tras las elecciones de 2019 para desbancar, vía moción de censura, a la ganadora de los comicios, Nieves Lady Barreto (CC). Y es que, además, la lista del PSOE ha rodado varios puestos, posibilitando que, como rara vez ocurre en una misma legislatura, se presente una segunda censura en la institución insular que torne el gobierno.
Las marchas de Alicia Vanoostende a la Consejería regional de Agricultura, Ganadería y Pesca; la de José Basilio Pérez al Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria y la de Anselmo Pestana a la Delegación del Gobierno central en las Islas abrieron, de por sí, un nuevo escenario en la política palmera. Y esta renuncia, de materializarse, otorgaría un consejero más habilitado para ser partícipe de una censura, en caso de que esta quisiera llevarse a cabo de la mano de los nacionalistas, que, como adelantó el DIARIO, habían llegado a ofrecer al PSOE la Presidencia, aun siendo la segunda fuerza.
EL PSOE LO NIEGA
A través de un comunicado, el PSOE palmero dijo confiar en que José Adrián Hernández “pueda reconsiderar esta decisión y poder así seguir contando con su valiosa aportación en la gestión insular y municipal”. Es más, en el mismo se alude a que los integrantes de la directiva conservan “la esperanza de que pueda replantearse la renuncia y reincorporarse a sus funciones”, siempre “desde el máximo respeto” a la decisión adoptada.
El secretario general de los socialistas en la Isla, Anselmo Pestana, quiso valorar la “trayectoria ejemplar” del puntallanero, tanto en el Cabildo, “donde se ha convertido -detalló- en un referente y un interlocutor muy respetado dentro del sector primario”, como en el Ayuntamiento. Y, por otro lado, aseguró que esta dimisión “no afecta ni está relacionada con el acuerdo de gobierno en el Cabildo Insular, donde se está trabajando desde la máxima unidad y lealtad, con más intensidad si cabe en este contexto de grave crisis que estamos atravesando” por el volcán.
EL FANTASMA DEL PACTO CAPITALINO
El alcalde de Santa Cruz de La Palma, Juanjo Cabrera Guelmes (PP), cesó a finales del año pasado a los concejales de CC, tal y como adelantó en exclusiva DIARIO DE AVISOS, rompiendo así la alianza que habían suscrito tras las últimas elecciones. Entonces, el secretario general del PSOE en La Palma, Anselmo Pestana, y el de Organización, Manuel Abrante, emitieron un comunicado en el que se desmarcaban de la que era considerada una “actuación irresponsable” del regidor.
Es más, ambos dirigentes afirmaron que no serían partícipes de “un juego de sillas” y no moverían ficha en ese sentido. Sin embargo, menos de 24 horas después, el portavoz de los socialistas, Juanjo Neris, llegó a un acuerdo con el PP para culminar la legislatura juntos, entrando en el grupo de Gobierno, en el que permanecía también Ciudadanos.
Este hecho, el de contradecir las directrices de la formación, sienta un precedente que azuza las posibilidades de CC de gobernar en el Cabildo, en la medida en que no ha habido consecuencias para los concejales capitalinos tras el supuesto caso omiso a las instrucciones del partido.