La sismicidad remite en La Palma en línea con la finalización de la erupción volcánica en Cumbre Vieja y desde la medianoche del lunes el Instituto Geográfico Nacional (IGN) no ha registrado ningún terremoto.
El Cabildo de La Palma informó ayer de que los accesos a las zonas evacuadas estaban abiertos tanto por el norte como por el sur, aunque en espera de la variación de las condiciones meteorológicas y la evolución del proceso eruptivo.
Por otra parte, el Gobierno de Canarias explicó que la prueba inicial que se realizó esta semana para la retirada de la lava en el cruce de La Laguna, en el municipio de Los Llanos de Aridane, ha dado unos resultados iniciales satisfactorios, lo que permitió continuar ayer con las tareas de actuación en la reconstrucción de los daños en las carreteras y accesos ocasionados por el volcán.
La realización de esta prueba o ensayo se acordó por el Comité Director del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) y fue aprobada por el director técnico, Miguel Ángel Morcuende, así como por el consejero de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias y responsable del Plan, Julio Pérez, y ratificada en la reunión que presidió el presidente del Ejecutivo nacional, Pedro Sánchez.
Los trabajos se iniciaron en la tarde del pasado lunes bajo la supervisión de Morcuende junto a personal técnico del Cabildo de La Palma y el asesoramiento de miembros del comité científico y de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Esta primera actuación sobre la lava se inició en un primer lugar con una cata manual que dio resultados negativos en cuanto a presencia de gases y una temperatura de colada en torno a los 24 grados centígrados. Posteriormente, se profundizó con maquinaria en tres sucesivas catas en las que se volvieron a medir gases y temperaturas, con resultados óptimos, ya que la temperatura máxima alcanzada fue de 120 grados y la única presencia de gases que hubo fue la del vapor de agua.
En esta primera prueba, se pudieron retirar unos cuatro metros de colada. Sin embargo, no es posible extender los resultados de esta prueba a otros sitios de la superficie afectada por la lava dado que, en otros puntos, las circunstancias y las temperaturas no lo permitirían.
Si el intento de desplazar la lava en este cruce tiene éxito, podrá recuperarse una parte muy importante de las comunicaciones en esta zona.