
La irrupción de los antivirales en la pandemia de coronavirus optan a ser la esperando de su transición a la endemia, que ayer ya barajó el Gobierno central a pesar de la advertencia de la OMS. En España retumba desde hace meses el denominado Aplidín, fármaco desarrollado contra la COVID-19, cuyo principio activo ha confirmado recientemente su eficacia frente a las variantes delta y ómicron; esta última responsable de la sexta ola que asola el país.
Según recoge este martes el diario EL ESPAÑOL, el estudio liderado por el doctor Adolfo García-Sastre, publicado en la revista Life Science Alliance, demuestra que el principio activo de la plitidepsina ha tiene una potente actividad antiviral en todas las variantes a concentraciones bajísimas con un índice terapéutico in vitro positivo.
“Cabe resaltar que los datos clínicos se corresponden con los preclínicos, sugiriendo un beneficio en la administración de plitidepsina a pacientes con coronavirus, y de que, en modelos preclínicos, plitidepsina tiene actividad antiviral potente no solo para SARS-CoV-2 y sus variantes, incluidas delta y ómicron, sino también contra otros coronavirus”, señala el científico.
Asimismo, el artículo hace una revisión de los datos del ensayo clínico APLICOV-PC1, en el que se demostró la seguridad de plitidepsina en pacientes con Covid-19 que requieren ingreso hospitalario. El ensayo alcanzó el objetivo primario de seguridad y mostró eficacia clínica. Además, el estudio reúne pruebas consistentes de un impacto mediado por plitidepsina en la carga viral, en las vías inflamatorias y en la normalización de la linfopenia.