
“Estábamos entregando tres botellas de aceite a cada familia pero ahora hemos tenido que reducirla solo a una. Los precios se han disparado y algunas empresas también están espaciando las donaciones que nos hacían”. Esta es la situación que está viviendo una de las ONG que reparte alimentos en Tenerife. Se trata de la ONG Sonrisas Canarias, cuyo presidente, Luis Febles, muestra su preocupación por las familias que atienden en toda la Isla. “Nosotros completamos las entregas de los fondos FEGA de la UE con productos que conseguimos a través de las donaciones o comprándolos de forma directa. Si la entrega de los fondos europeos ya se había reducido, pasando de cuatro al año, a solo dos en este 2022, ahora nos estamos encontrando que cuando preguntamos a grandes superficies por productos para completar las entregas nos están contestando que no hay en stock”, explica.
Entre los productos que las grandes superficies han dicho que no tienen están los cereales de trigo, el atún en aceite de girasol, los garbanzos, el aceite refinado de girasol o lentejas. “Nos parece escandaloso que nos digan que no hay stock porque nos parece increíble que sea así. Estamos convencidos de que los retiran de las estanterías para subirles el precio y volver a colocarlos. Solo con el aceite hemos comprobado que la comprábamos a 97 céntimos y ahora la están vendiendo a 2,70 euros, eso es más de un 100% de subida, es un abuso”, lamenta.
El alza de precios también está haciendo que las familias no puedan completar las ayudas que reciben, lo que ha obligado a la ONG a adelantar las entregas de alimentos. “Estábamos atendiéndolas cada dos o tres meses y ahora hemos tenido que hacerlo con algunas cada mes y medio porque nos llaman y nos dicen que no llegan”, explica Febles.
Sonrisas también ha sido previsora y ha reservado unos 300 kilos de gofio porque les avisaron que el precio iba a subir. Ahora mismo, aquellos que quieran hacer donaciones, lo que más necesitan es aceite, leche, enlatados y productos frescos. En cuanto a la atención que esta ONG proporciona a distintos municipios de la Isla, confirma que la situación ha seguido empeorando. “Solo en estos tres primeros meses del año hemos atendido a un 22% más de personas comparados con el primer trimestre del año pasado”. Según el presidente de Sonrisas Canarias, “aunque tenemos familias que han dejado de necesitarnos, porque han encontrado trabajo, por ejemplo, lo que hemos detectado es que familias que ya habían dejado de venir, de hace siete u ocho años atrás, han vuelto a la ONG, lo que da muestra de lo que está pasando con la situación actual”, concluye.
Otra de las ONG que opera en la capital, Kairós, admite que en el punto de donaciones que tiene en Parque Bulevar se ha notado el descenso, aunque su presidente, Benjamín Barba, matiza que en su caso al repartir solo los fondos FEGA, aún no ha notado en exceso el alza de precios y la falta de productos. “Nosotros usamos las donaciones para completar la cesta de productos básicos que entregamos”, apunta. Sí que muestra su preocupación por la tardanza en llegar la tercera fase del FEGA correspondiente a 2021 y que tendría que haber llegado ya. “Normalmente está aquí a finales de febrero, comienzos de marzo, y nos extraña que aún no nos hayan avisado del Banco de Alimentos para ir a recogerla”. Explica Barba que están ajustando al máximo las entregas que están dando a las 500 familias que atienden mensualmente ante la posibilidad de que se retrase más esta tercera fase. “Nos estamos quedando sin alimentos, y si en las próximas dos semanas no llega el FEGA pendiente, no vamos a poder repartir”, detalla.
Kairós entiende que este retraso se solventará antes de que acabe el mes, y puedan seguir prestando ayuda a las 1.500 personas que se dividen en esas 500 unidades familiares a las que cada mes reparten unos 20.000 kilos de alimentos. Barba cree que el retraso no obedece a las consecuencias de la guerra en Ucrania o el alza de precios, puesto que los alimentos del FEGA están comprados con anterioridad al estallido del conflicto. Cuestiones estas últimas que, dice, sí que es posible que afecten a la primera entrega de 2022 que tendría que llegar en junio.