El presidente de los constructores tinerfeños, Óscar Izquierdo, calificó de “esperanzadora” la previsión de más de 500 millones de inversión (400 procedentes de la iniciativa privada y más de 100 de la pública) para el puerto de Granadilla anunciada el pasado miércoles por el presidente de la Autoridad Portuaria. A su juicio, esta cantidad demuestra que la instalación sureña, aún en fase de construcción, cuenta con potencialidad suficiente para convertirse en un foco dinamizador de la economía de Tenerife.
“Solo hay que tener ganas y poner las condiciones suficientes y eficientes para que su desarrollo sea completo, lo que no ha sucedido hasta ahora por cuestiones políticas e ideológicas; ahora sí se nota un impulso esperanzador”, manifestó ayer a este periódico el presidente de la Federación de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife (Fepeco).
Para Izquierdo, es el momento de despejar las dudas sobre la construcción del puerto industrial y “pasar a los hechos de su utilidad, porque en un territorio insular este tipo de infraestructuras siempre aportan valor añadido a nuestro sistema productivo y asegura una logística comercial e industrial que aporta tranquilidad”, lo que lleva al presidente de los constructores tinerfeños a una conclusión: “Se ha pasado del no al puerto de Granadilla al sí de su necesidad”.
previsiones
El presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos González, destacó en un foro empresarial los 100 millones de euros inversión de Petrocan, que en breve comenzará el traslado de las instalaciones de Cepsa hasta Granadilla, donde ocupará una superficie de 12 hectáreas y los 150 millones previstos por el Hub del Hidrógeno de Canarias, que se instalará sobre una extensión similar.
La inversión privada se completa con otros 104 millones del primer parque eólico marino offshore que se tramita en España, que constará de cinco aerogeneradores, y 40 millones más para instalar dos diques flotantes, aunque uno de ellos será para el puerto de Santa Cruz de Tenerife.
En cuanto a las inversiones públicas, los dos grandes proyectos en marcha, que se esperan sean financiados con fondos europeos, serán los 577 metros construidos con 12 cajones de hormigón para cerrar el muelle de ribera (70 millones de euros) y diversos planes de experimentación, con nuevos prototipos para la energía eólica flotante y el aprovechamiento de las olas.
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