Son espectaculares debido a su encendido color y, como asegura la cuenta de Twitter del Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN) “frágiles y efmímeras”: lo cierto es que las agujas de azufre en el volcán de La Palma son todo un espectáculo.
En el tuit de INVOLCAN catalogan de “joya” a estas agujas, de un característico color amarillo que “riega” el interior del cráter de un volcán en el que pueden apreciarse vivos colores debido a los elementos químicos que allí se encuentran.
En el interior del volcán destaca el rojo, de aquellas gotas de azufre líquido, como gotas de sangre de las arterias del volcán, que tiñen de rojo algunas zonas del interior del cráter. El color rojo del azufre líquido solo ocurre a una temperatura por encima de los 190°.
El amarillo, el color de las agujas de azufre en el volcán de La Palma, es el característico de este elemento químico, un gas que los volcanes suelen expulsar en grandes cantidades durante las erupciones. Cuando el azufre tiene este color amarillo, es porque se trata de depósitos de azufre elemental. Este es el color característico del azufre sólido.