La plataforma vecinal Todos con La Rambla ha denunciado un hecho ocurrido en los últimos días y que califica como “insólito”. Un vecino se encontró con la sorpresa de que podía girar desde la salida del barrio hacia la izquierda, en dirección Santa Cruz, porque habían pintado las rayas discontinuas que permitían realizar esta maniobra, tan demandada por los habitantes del barrio.
También se dieron cuenta de que habían colocado señales con la advertencia de velocidad y peligro. “Algo insólito, pero que nos dio mucha alegría”, confiesa su portavoz, Adela Abreu. Sin embargo, la ilusión se esfumó al día siguiente cuando los vecinos comprobaron que “de un coche del Cabildo se bajaron dos personas que sacaban fotos de las rayas pintadas y 24 horas después ya habían sido borradas y cambiada toda la señalización.
La plataforma no ha tomado todavía ninguna medida a la espera de que el presidente insular, Pedro Martín, comience a trabajar sobre los acuerdos a los que se llegó en la reunión del 15 de julio.
