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Santa Cruz pide casi ocho millones a la UE para limitar los coches en el centro

La capital se presenta a una convocatoria de los fondos ‘Next Generation’ para implantar la Zona de Bajas Emisiones
Vehículos en una de las principales arterias de acceso a la capital santacrucera.
Vehículos en una de las principales arterias de acceso a la capital santacrucera. Fran Pallero

El Ayuntamiento de Santa Cruz se presentó, el pasado 29 de septiembre, a una convocatoria de los fondos europeos Next Generation solicitando una subvención de 7.856.205,32 euros para diferentes proyectos relacionados con la implantación de Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), con la limitación de coches en el centro, y el fomento de un cambio modal de transporte en la ciudad. Suponen un presupuesto total de 12.078.350 euros (con IGIC), por lo que la financiación con fondos del Ayuntamiento ascenderá a 4.222.144,69 euros.

En concreto, según datos del Consistorio, uno de los proyectos presentados a la subvención es la creación de un Centro de Control Integral para la Gestión de la Movilidad en la capital, que supone la implementación de una Sala de Control Integral que aglutine todos los elementos de gestión de la movilidad en una única Plataforma SmartCity, por un presupuesto total de 1.051.898,24 euros.

Asimismo, otro es para el desarrollo de itinerarios ciclistas en la ciudad, por 3.500.000 euros, que conecten la mayor parte de los distritos y, a su vez, den continuidad a los carriles existentes o en proyecto, así como con los aparcamientos disuasorios previstos en la capital. También se propone la creación de un itinerario seguro que sirva de unión entre los tres centros escolares existentes en el barrio de La Alegría, así como el club de fútbol base ubicado en el mismo margen, con el barrio Residencial Anaga y sus zonas comerciales de proximidad.

Además, se complementará con la construcción de aparcamientos seguros para bicicletas en cada uno de los centros y con actuaciones de calmado de tráfico rodado en el entorno de las infraestructuras escolares. El presupuesto es de 4.736.790 euros.

El último de los proyectos, con un coste de 1.999.489,34 euros, es para acciones en el aparcamiento disuasorio que el Ayuntamiento prevé ubicar en la entrada sur de la ciudad. El objetivo es disuadir la utilización del coche para acceder a Santa Cruz, facilitando un lugar cómodo, seguro y gratuito para aparcar en la periferia de la ciudad y con conexión al transporte público, cercano al Intercambiador y coincidente con el comienzo de la infraestructura ciclista de la avenida Marítima, incluyendo puntos de recarga de vehículos eléctricos alimentados por placas solares, entre otras acciones.

Cambio de modelo

El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, resaltó que “el nuevo modelo que tratamos de implantar en todo el municipio se concreta en el centro de la ciudad con la apuesta por un cambio en el modelo de transporte en el acceso a las principales arterias de la capital”. Igualmente, añadió que, “por ello, hemos diseñamos una solución tecnológica basada en herramientas Open Source que integren la monitorización y el control en tiempo real de los sistemas verticales de movilidad urbana”.

“La Zona de Bajas Emisiones -continuó Bermúdez- estará íntimamente ligadas a otras acciones que tienen que ver con las gestiones de parkings, de aparcamientos regulados y disuasorios, y de los sistemas que implantaremos para la recarga de vehículos eléctricos”. Y concluyó anunciando que se ejercerán “controles de acceso al centro de la ciudad, además de definir zonas de carga y descarga, todo ello para tener muy en cuenta la gestión ambiental y aumentar la calidad del aire en esta cocapital de Canarias, precisamente con la intención de que sea un referente de sostenibilidad y calidad de vida”.

Por su parte, el concejal Juan José Martínez, encargado de los proyectos estratégicos en el municipio, destacó que estas actuaciones van a permitir, entre otras cosas, “disponer de un centro de mando y control de la ZBE, puntos de aparcamientos disuasorios a la entrada de la ciudad, puntos de recarga de vehículos eléctricos, zonas de carga y descarga, etcétera,” y puso de relieve que, además, “se generará una red estructurante de itinerarios ciclistas más seguros para este tipo de vehículos”.

Asimismo, el concejal de Servicios Municipales y Medio Ambiente, Carlos Tarife, apostó porque “todo esto genere un efecto de evaporación del tráfico en el interior del centro de la ciudad”, y valoró también que “se persigue una red atractiva, segura, cómoda y directa para que los usuarios de Vehículos de Movilidad Personal y las bicicletas circulen con garantías a través de los puntos de atracción y oferta de la ciudad”.

Mientras, la concejala de Movilidad y Seguridad Vial, Evelyn Alonso, destacó que “la apuesta es clara para limitar el vehículo privado, con especial incidencia en la zona centro, constituyendo un gran apoyo para la implantación de la ZBE y mejorando la calidad de vida en este ámbito”.

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