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Tigaiga monta su belén viviente

Tras dos años sin función por la pandemia, mañana, desde las 18.00 horas, vuelve la tradicional representación al barrio realejero, que se transforma en Belén y Nazaret para celebrar la llegada del niño Jesús al pie del risco tigaiguero
Niños, jóvenes y mayores del barrio dan vida a icónicos personajes de la época. Javier J. Suárez Rodríguez

Por Doris Carballo. | Los vecinos del barrio de Tigaiga, en Los Realejos, volverán a transformar sus calles, este 25 de diciembre, de Nazaret y Belén para revivir, después de tres años, su particular belén viviente, donde ellos son los protagonistas.

Tras la última función, allá por el 2019, la calle Tigaiga, desde la Asociación de Vecinos Tigotán hasta la plaza de la Hispanidad, ubicada al pie del risco del citado barrio, se transforma en un escenario que evoca los lugares donde tuvo lugar el nacimiento de Jesús de Nazaret.

Bajo la luz de las antorchas, que sustituyen a las farolas, se desarrolla una representación teatral en la que los participantes, ataviados con la indumentaria de la época, trabajan en las labores propias que se llevaban a cabo en pleno Imperio Romano y rememoran escenas clave que se produjeron en aquel entonces justo antes de la llegada del redentor.

Decoración del barrio

Tigaiga
La tradición comenzó en 1972, hace 50 años. J. J. S. R.

Niños, jóvenes y mayores del barrio son los encargados de llevar a aquellas personas que lo visiten a otra época gracias a la decoración y a la preparación de las vías, de los terrenos y de las viviendas que lo conforman. Pastores y mercaderes recorren el lugar junto a sus animales, y, entre otras cosas, cumplen su jornal, hacen la compra o pasan el poco tiempo libre que tienen echándose un vaso de vino, pero siempre bajo la lupa de los romanos, quienes imponen su ley bajo el mando del emperador César Augusto.

50 años de tradición

Tigaiga
Los vecinos siguen un libreto teatral. J. J. S. R.

Una tradición que comenzó hace 50 años, dado que su origen data de 1972, y que fue impulsada, a su llegada a Tigaiga, por el párroco salesiano Guillermo González Navarro. Desde entonces hasta nuestros días solo ha sufrido dos parones en el tiempo: uno de dos años en los 80 y otro que abarca las dos últimas ediciones, como consecuencia de la pandemia de la COVID.

Tradicionalmente, el portal viviente comenzó a realizarse la noche del 24 de diciembre, aunque desde el año 2013 se representa el día de Navidad, el 25, teniendo una mayor aceptación por parte de los numerosos visitantes que acuden cada año.

De esta manera, mañana, a partir de las 18.00 horas, empieza la ambientación y, de forma correlativa, cuando llegue la noche, se desarrollarán las diferentes escenas, donde se incluye un libreto teatral, en las que se da vida a la virgen María, San José, el niño Jesús, el ángel Gabriel, Isabel (prima de María), Zacarías, los romanos, los pastores, entre otras personalidades, en varios escenarios: el mercado, la huerta de los pastores, la anunciación del Ángel, la casa de Isabel, la taberna, el castillo de los romanos, la hoguera de los pastores, el censo y, por último, ya en la plaza, donde se encuentra el pesebre, se representan la Posada, el nacimiento de Jesús y el anuncio del Ángel a un grupo de pastores de la llegada del redentor.

Nacimiento del niño Jesús

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La escenificación se desarrolla desde la Asociación de Tigaiga hasta la plaza de la Hispanidad. J. S. R.

El acto concluye con el nacimiento en el pesebre, que se sitúa en la plaza de la Hispanidad, del niño Jesús y con la llegada de los pastores a adorarlo, después de bajar e iluminar previamente con sus antorchas el risco de Tigaiga.

El barrio realejero espera con los brazos abiertos a todas las personas que quieran rememorar esta tradición, que evoca el año I a.C.

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