En la noche del pasado domingo, un avión que volaba de Tenerife a Liverpool tuvo que desviarse de su ruta y realizar un aterrizaje no programado en el aeropuerto de Santiago de Compostela, en Galicia.
La escala imprevista fue causada por la necesidad de intervenir frente al comportamiento problemático de un pasajero durante el vuelo, según informa Ryanair.
El avión aterrizó sin contratiempos en el aeropuerto Rosalía de Castro. Posteriormente, de acuerdo con la versión de la compañía aérea, la policía sacó al pasajero de la aeronave, resolviendo así el origen del problema, y se reanudó el vuelo en su trayecto hacia Liverpool.
Cabe destacar que cuando suceden estos casos, el personal de cabina intenta desde un primer momento dialogar con el viajero que está ocasionando situaciones conflictivas.
Sin embargo, si el pasajero persiste en su actitud, la tripulación pone los hechos en conocimiento del comandante, quien debe determinar la necesidad de desviar el avión a otro aeropuerto.