Los casi 300 vecinos que viven en las 70 viviendas de la urbanización Virgen del Carmen, en Guargacho (Arona), ya no tendrán que deambular entre escaleras rotas, recorrer caminos en los que una vez hubo plantados algunos árboles o sufrir las perennes humedades de la barriada, como si este fuese el precio a pagar por vivir en una vivienda social.
Así ha sido durante décadas, el tiempo que ha tardado una de las primeras promociones de vivienda social de la historia del municipio en decir “hasta aquí hemos llegado”. Si los edificios hablasen, claro está. Sin espacios verdes ni lugares para que jueguen los niños o paseen los mayores.
Esta realidad ha comenzado a cambiar con el inicio de las obras de la que es la primera acción integral de reforma y rehabilitación de la zona (conocida bajo las siglas de ARRU) de la historia de Arona, y que fue impulsada por el gobierno municipal que presidía el ya exalcalde y actual portavoz del PSOE, José Julián Mena, quien aprovechó la puesta en marcha de los trabajos para reunirse con algunos vecinos de la urbanización, próxima a la Costa del Silencio.
Para revertir la decadencia de décadas será necesaria una inversión de 2,8 millones de euros con un plazo para la ejecución de los trabajos de 14 meses. Del total de la inversión prevista, el Ayuntamiento de Arona aporta casi 274.000 euros; el Cabildo de Tenerife, 535.800; el Gobierno de Canarias, 746.700 euros, y 995.600 euros, el Ministerio de Fomento.
Las palas ya trabajaban ayer en los espacios comunes de la urbanización. Para llegar a este punto ha sido necesario recorrer un camino que no ha sido fácil: se inició en 2018, con la reunión de Mena y del entonces concejal del grupo de gobierno Francisco Marichal con la directora del Instituto Canario de Vivienda (Icavi), un encuentro gracias al cual el proyecto fue incluido en el Plan Estatal de Vivienda 2018-2021.
Hay que recordar que otros municipios de Tenerife, como Santa Cruz, han realizado inversiones públicas en los últimos años para reformar su parque de viviendas sociales. En el caso de Arona, Virgen del Carmen supone un hito, al ser la primera que se pone en marcha. En el resto de la comarca sur de la Isla casi no se conocen otros ejemplos de acciones integrales de reforma y rehabilitación de estas características.
REFORMAS INTEGRALES EN MARCHA
Además de estas 70 viviendas sociales de la urbanización Virgen del Carmen, el municipio de Arona suma hasta 375, teniendo en cuenta las 204 de San Martín de Porres, en Cabo Blanco, y las 101 de Hermano Pedro y Vento, en el entorno del casco histórico de Arona.
Gracias a estas obras, la urbanización Virgen del Carmen, en Guargacho, pasará a tener un aspecto totalmente renovado, con espacios modernos y adaptados a personas mayores y con problemas de movilidad, rampas, zonas ajardinadas y un área infantil para los más pequeños de la urbanización.