Un pacto regional entre Coalición Canaria y el Partido Popular trasladado a los ayuntamientos del Sur acabaría con la hegemonía histórica (durante años aplastante) del Partido Socialista en las corporaciones locales del sur de Tenerife. Aunque el PSOE ganó el 28M en siete de los nueve municipios de la comarca, corre el riesgo de gobernar tan solo en los que consiguió mayoría absoluta (Adeje, Fasnia y Vilaflor de Chasna), en caso de prosperar las alianzas entre nacionalistas y populares.
Ayer, dirigentes de ambos partidos reconocieron al término de la primera reunión de las comisiones negociadoras su predisposición a ir de la mano en las instituciones que puedan, tal como puso de manifiesto el portavoz de la delegación del PP, Poli Suárez: “Las direcciones insulares están coordinadas con la dirección autonómica y la voluntad es hacer acuerdos con CC donde sumemos”.
Si los dos partidos pactaran apoyar la lista más votada de ambas formaciones políticas -en algunos casos precisarían el respaldo de un tercer actor- CC y PP se repartirían el poder en Arona, Granadilla de Abona (los dos municipios de mayor población del Sur) y Guía de Isora.
Aplicando ese criterio, Ana Dorta (CC) arrebataría la presidencia del Consistorio de Guía de Isora a Josefa Mesa después de 28 años de contundentes victorias socialistas y José Domingo Regalado (CC), aunque no llegaría a la mayoría absoluta, podría retener la Alcaldía de Granadilla, dando por descartado un pacto PSOE-Vox.
Otra cosa es que Jennifer Miranda (PSOE), que obtuvo un concejal más que CC, cierre un acuerdo contra natura con el PP (posibilidad que se ha llegado a tantear antes de las elecciones), lo que podría acarrear consecuencias en un escenario de acuerdos en cascada dado el peso poblacional, político y económico de Granadilla de Abona. La cercanía de unas elecciones generales a cara de perro entre socialistas y populares no parecen ayudar a una alianza entre Jennifer Miranda y Marcos Antonio Rodríguez, pero no sería la primera vez que el Ayuntamiento granadillero iría a contracorriente de la tendencia global.
Un cuarto municipio que necesitará acuerdos para gobernar es Arico, donde las opciones están más abiertas. Olivia Delgado (PSOE) rozó la mayoría absoluta, pero le hace falta un edil. CC sumó 3, Arico Somos Todos (AST) 2 y PP otros dos. Nacionalistas y populares no suman, por lo que todo apunta que la gobernabilidad pasa por los dos ediles de AST.
A TRES BANDAS
De materializarse el pacto CC-PP y respetando el acuerdo de apoyar la lista más votada, Arona contaría con su primera alcaldesa, Fátima Lemes (PP), que se impuso por un puñado de votos (74) a Clara Pérez (CC). Para ello es necesario que se sume a la alianza de gobierno Más por Arona, la fuerza surgida a raíz de la ruptura del grupo socialista, liderada por Dácil León, que ya ha trasladado a ambos partidos su voluntad de una alianza a tres bandas, lo que dejaría en papel mojado el triunfo de José Julián Mena (PSOE) y lo condenaría a la oposición después de ocho años al frente del Ayuntamiento. Fátima Lemes ya ha reconocido a este periódico que está “preparada para ser la primera alcaldesa de Arona” después de los primeros contactos con Clara Pérez y Dácil León.
A pesar de que los números sonríen a la alianza CC y PP, el PSOE busca minimizar el impacto en los ayuntamientos sureños y no renuncia a explorar vías que le permita gobernar en alguno de los cuatro municipios que están en el aire. Aunque admite que el tablero de un acuerdo regional CC-PP no lo pone nada fácil, las matemáticas dicen que no están tan lejos: le dan para un pacto con CC o PP en Arona, con el PP en Granadilla de Abona y Guía de Isora, y con uno de los tres partidos que lograron representación en Arico.